NUNCA
ESTUVISTE TAN ADORABLE

ANABEL
ALONSO
FOTO BASE: ALBERTO NEVADO |
- Esta abuela mía un poco puta, mi madre
porteña, mi padre suizo y en una Argentina donde no se habla de Perón,
es lo menos argentino del mundo. Después, cuando los argentinos se
reconocieron en esta familia, pues pensé que “no hay familia argentina”. Mi visión es una mirada infantil que
mezcla películas con la vida real. Es una unión entre recuerdos de cosas
reales e idealizadas, fotos que has visto. El vestuario y peinados los
hemos reconstruido a partir de fotos, pero hay que recordar que, en
aquella época, se vestían y se peinaban para hacerse la foto. Así que reconstruimos
imágenes espléndidas.
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JAVIER DAULTE |
Esta es, al final, la visión global del mundo que ha reconstruido
el director y autor Javier Daulte con su obra Nunca estuviste tan adorable.
Oyéndole hablar recuerda la película Amarcord (I miei riccordi) de Federico Fellini.
- No, no es
igual – corrige Javier
Daulte -, Fellini hace la arbitrariedad del recuerdo y lo hace surrealista. Yo no.
Esta historia de familia tan peculiar es el nuevo título que
estrena el Centro Dramático Nacional en el Teatro Valle Inclán y que
según Gerardo Vera:
- Tengo la impresión de estar
continuamente estrenando y es que son 4 salas. Javier Dualte entra en el proyecto de
la Dramaturgia universal y del teatro de
la Nueva
Dramaturgia Española Hispanoamericana que, ya iniciamos con Daniel
Veronese. Nunca estuviste tan adorable es
una comedia costumbrista, en que entra en lo contemporáneo y a la vez
comprometido. Es una coproducción del Festival
Grec de Barcelona, el Centro Dramático Nacional y
la Sala Villaroel de Barcelona.
NUNCA ESTUVISTE TAN ADORABLE,
FRUTO
BASTARDO DEL PROYCTO ARGENTINO
“BRIODRAMA”
Javier
Daulte es dramaturgo, guionista, director de teatro, profesor de
interpretación y dramaturgia y, con regularidad, tiene seminarios en Buenos
Aires y Barcelona, donde es asesor de
la Escuela de Interpretación Eòlia. En la
actualidad es director de
la Sala Villaroel. La
mayoría de sus trabajos haN sido estrenados y publicados, así como ha obtenido
diversos premios.
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- Cuando Gerardo me invitó, hace dos años, en su despacho, no pensaba hacer este montaje
que estaba programado en Buenos Aires. Pero comprendí la sugerencia al ver
sobre su mesa el programa de mano argentino y me decidí a hacerlo. Al
sumarse el Greck y la sala
Villaroel, el proyecto
cobró más sentido. En el fondo, tenía también ganas de hacerlo en
España y esta era la oportunidad.
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PROGRAMA
de la
VERSIÓN
ARGENTINA
2004 |
Nunca estuviste tan adorable es un texto de 2004 y venía promovido
por un experimento teatral llamado Biodrama,
que inició la argentina Vivi Tellas,
directora del Teatro Sarmiento, en
Buenos Aires.
- La premisa era:
hacer teatro sobre personas vivas. Cuando me llamaron creían que yo conocía
dicha premisa, pero no era así. Yo pensaba que se trataba de biografías de
gente no relevante y pensé en mi abuela
Blanca.
Entonces me puse a escribir. Cuando lo vieron me dijeron que el personaje
tenía que ser vivo y Blanca ya había muerto. Así que me
dijeron que no. Pero otros personajes vivían: mi padre,
mi tío y así pudimos entrar en el proyecto de Biodrama.
Me vinieron varias ideas como por ejemplo poner a mi madre real sobre el
escenario en una obra de gran formato con telón incluido en el sentido del
teatro tradicional. Pensé que se reirían al ver el telón. ¿Cómo seguir con
el telón, al que hace tiempo había renunciado?
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VERSIÓN ARGENTINA
VERSIÓN ESPAÑOLA |
La obra recorre dos épocas que Javier etiqueta como
- …mi
prehistoria y mi historia. Es la historia de la familia de mi madre cuando
era muy joven y mi abuela también joven, porque mi madre se casó muy joven.
Arranca en los años cincuenta y se pasa sin estaciones intermedias
a los comienzos de los setenta. Quince años les separan.
Basándose en su familia el proceso de reconstrucción tuvo sus idas
y venidas:

FOTO: ALBERTO NEVADO |
- Quise documentarme acerca de la época
a través de revistas y periódicos. Tenía pensado entrevistar a mis padres,
mis tíos y a mi hermana mayor. Pero me di cuenta que ese no era el camino
adecuado. La historia les era distante y no la reconocían. Entonces
comencé a reconstruir
la historia a partir de lo que yo recordaba. Todo lo que
ocurre es cierto y verdad, pero hay connotaciones especiales y temporales
que están trasladadas. Lo curioso es que yo pensaba que mi madre iría a
ver sus recuerdos que no eran los míos, y comprobé que lo que vió, para
ella, era igual que lo que había vivido.
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HISTORIAS
DE AMOR Y DESENCANTO
Esta historia que Javier nos cuenta, parte de la consideración de cada uno de nosotros como…
- …el producto
de una innumerable sucesión de hechos extraordinarios: un inabarcable sin
fin de historias de amor, algunas afortunadas, otras truncadas, muchas sin
duda frustradas o frustrantes, otras envidiables. Las más, sin duda,
equivocadas. La propia existencia es en sí misma prueba de tan inverosímil
y empalagoso cúmulo romántico. Un tejido desiderativo las más de las veces
sepultado bajo montañas de censura y tabúes familiares de la más
variada índole. Desde el punto de vista temático, son éstos, sin duda,
aspectos que se desarrollan en esta pieza. Sin embargo hay otro aspecto
sobre el cual también me interesa reflexionar: el tiempo.
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FOTO: ALBERTO NEVADO |
EL
TIEMPO, PROTAGONISTA
DE
LA
OBRA Y UN “ALGO”
MOTOR
DEL DESARROLLO DRAMÁTICO
Javier especifica que Nunca estuviste tan
adorable se presenta como una obra de época. Se salta de los cincuenta y a
los setenta y este “salto”, confiesa Javier que
- Desconozco la
causa por la cual esto ha terminado así planteado, aunque de hecho soy el
autor del texto y por lo tanto se supone que algo debería poder decir al
respecto. Creo que los sesenta no quieren decir nada en sí mismos, así
como tampoco los cincuenta y los setenta. En realidad las claves del
relato deberían comenzar por explicarse desde otro lugar. En ese otro
lugar tiene menos que ver con el tema de las épocas que con el problema de
la temporalidad.
Es desconocimiento de por qué se le ocurrió esta historia lo
define Javier con una palabra “algo”.

FOTO: ALBERTO NEVADO |
- Hubo algo que me llevó a pensar en los orígenes
de lo que era tan arbitrario como
uno mismo. Pensé en los cincuenta como ese momento primordial en que una
cantidad de historias de amor se encontraban vigentes, para bien o para
mal. Los protagonistas de estas historias son mi mamá, mi papá, mi abuela, mi abuelo, mi tío, mi tía y una vecina de la familia. Y esto, visto desde un niño que
aun no es tan perverso como para entrever en esa red de parentescos
sexualidad o deseo alguno. Después cuando la idealización cae, podemos
cuestionar los triunfos y los fracasos personales de toda esa gente, que
lo único que hacen en un árbol genealógico es señalar a la sucesión
de herederos de
un apellido. Si uno se distancia de ese fatalismo generacional,
se encuentra un terreno más lábil, donde lo que se ha leído como
inexorable, no es más que un momento, una situación, en definitiva, una
casualidad histórica. Ese campo casual es terreno privativo de la ficción.
Y es en ese sentido en que me interesa la ubicación en la prehistoria de
lo que me trajo al mundo. Que sean los cincuenta es, desde cualquier otro
punto de vista, irrelevante. Más claro: Nunca estuviste tan admirable no es una obra histórica. Tiene
contexto, eso sí. Pero el contexto de una obra de una obra excede siempre
ampliamente el aspecto de su ubicación en la ficción. Y en tal caso, la
ubicación histórica de una obra es la de su producción y no la de la época
a la que se refiere. Por lo tanto debo decir que se inscribe
históricamente en ese 2004, cuando la escribí.
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HOLLYWOOD
ENREDANDO
EN
LA HISTORIA
Javier
Daulte precisa tres momentos temporales en la obra:
- Primero el tiempo de aquello que me
dijeron que sucedió; segundo el tiempo de aquello que creo que sucedió, y
tercero el tiempo de aquello que desearía hubiese sucedido. Lo que sigue,
a grandes rasgos, la historia de la familia de mi mamá. El tono es, para
mi, inevitable, una comedia costumbrista, pero al escribirla buscaba una
obra que me hubiera gustado ver en cine. A Blanca le gustaba Hollywood, era una gran
costurera y cosía, para ella, vestidos copiados del cine, pero que luego no se ponía por lo exagerado que
eran, una gran cola etc. Es como una película de los años cincuenta.
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FOTO: ALBERTO NEVADO |
Aparece toda la familia, pero no el propio Javier Dualte.
- Podría hacerlo
en la segunda parte, pero se supone que soy pequeño. Me interesaba
la época de la mirada de un niño en sus recuerdos. Esta familia no
tiene nada de extraordinaria. Cualquier vínculo cobra mucho interés como
cualquier historia contada a través del tiempo. Por ejemplo, ves una
señora muy mayor y te enteras de que de joven era la más guapa del
pueblo, y entonces surge una dramaturgia. Así pues mi abuela es un buen personaje para el teatro.
BLANCA
DOMÍNGUEZ,
ROMPEDORA
DE LOS
MOLDES ESTABLECIDOS
Blanca
Domínguez, la abuela de Javier,
es un personaje que le fascina.

ANABEL ALONSO (BLANCA)
FOTO: ALBERTO
NEVADO |
- Era de origen español que vive
la inmigración con una pobreza absoluta. Los siete hermanos viven en una
única habitación. Progresaron en los años cincuenta llegando a ser
una familia de clase media acomodada. A Blanca le amargaba tanto su infancia de
pobreza que rechazaba todo lo que le podía recordarla. Comienza renovando
los muebles que los hacía construir a ebanistas. Yo la conocí, y murió
cuando yo tenía 23 años. Era una mujer que manifestaba que todos
fueran bellos y todo bello. Había ciertas incógnitas como el que el
televisor se lo regaló un amigo que no sabemos quien es, luego tenía
muchos admiradores, pero nunca supimos
cómo llegaban a ella. ¿Los
seducía, se acostaba con ellos? Mi madre tampoco supo nada en concreto. Para mí, mi abuela era un personaje muy atractivo.
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EL
PASO DEL TIEMPO:
UN
CAMINO HACIA
LA MUERTE
Si se quiere buscar un tema central Javier, aunque duda, lo formula como…
- …el paso del tiempo. Me cuesta
responder. El escribir sobre personajes vivos y queridos me ponía en un
brete. ¿Cuáles son los conflictos, tramas de conflictos
familiares…? Siempre parecerán que están a la orden del día. Más bien la
pregunta es ¿por qué yo amo a esta familia? Es difícil responder.
No hay razones. Se ama a la familia porque sí. Pensar que es porque te dan
la teta, dinero etc… es absurdo. Hace dos años mi padre murió,
tenía 84 años. Al verlo tan mal te das cuenta de que ya no va a
cambiar y eso es duro. Cuando escribí la obra esto tuvo que ver bastante.
El conflicto es…, sí, el paso del
tiempo. Uno se va dando cuenta de cómo va pasando, como sucede en Días Felices de Becket: Se
asiste al deterioro y el camino hacia la muerte…
DE MI
FAMILIA REAL
A MI
NUEVA FAMILIA TEATRAL
Llegar a recrear a su familia es un proceso complejo, que ha
supuesto varios pasos:
- En el primer montaje de Argentina tuve
que vencer enormes prejuicios. Debía romper con las imágenes indelebles
que conservaba respecto de los lugares y las personas reales de la
historia. Fui superando esos obstáculos. En principio, la escenografía no
era el piso de Olivos en el que vivieron mi abuela, mi madre, mi tío, mi
padre, mi hermana y yo. Y sin embargo lo era. María Onetto –
la protagonista argentina – no
era Blanca, pero supo serlo. Luciano Cáceres, no era, en absoluto, mi padre, pero
lo fue. Y así todo. Mi nueva familia se hizo realidad y a veces pienso que
mi hijo recordará a sus ancestros con la cara de un grupo de actores
argentinos.
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FOTO: ALBERTO NEVADO |
Ese proceso de olvidarse del original real y pasar a los actores
se ha vuelto a repetir.
- En Madrid ya
no sólo se trataba de suplantar semblantes y modos de mis seres queridos,
sino también los de
la Compañía argentina. No pude menos que
sorprenderme, para bien, en cada paso que se daba. Desde la escenografía
de Ramón Simón hasta el reparto, todo empezó a
cobrar entidad de la manera más fluida y aceitada.

FOTO: ALBERTO NEVADO |
La obra nació en Argentina y reflejaba una familia argentina, que
terminó por ser más universal de lo que parecía. Al montarla en Madrid se
presentaba la tentación de ambientarla al universo madrileño.
- Mi amigo Doménech Reixach evitó que cayera en la tentación y la
dejé en Buenos Aires. Tampoco se quitaron los incomprensibles
argentinismos. Es posible que algunas referencias pierden fuerza en la
versión madrileña. Las connotaciones de los barrios de Olivos y Barracas, la imagen que todos los
argentinos conocen del paquete de harina
Blancaflor. Pero preferí no buscar engorrosas equivalencias. Sólo
algunos argentinos que la vean en el Teatro
Valle-Inclán,
conocerán esas resonancias. Han habido muy pocas modificaciones.
Esa famosa abuela Blanca, en España, es
interpretada por la televisiva y popular Anabel
Alonso - que cuando la televisión le deja se sube al escenario -, Javier Daulte la ve con…
- …un gran
parecido con Blanca y en el
caso de mi madre, la actriz
española también lo tiene.
En general los actores no han visto el montaje argentino, ni
siquiera el DVD que hay grabado. Ello ha hecho que el grupo de actores, a lo
largo de su trabajo, hayan construido una familia, algo que Javier Dualte lo ve como necesario en
esta obra:
- No se puede
trabajar de otra manera. Una familia se construye en cuanto que establece
vínculos y eso no se puede calcar, por eso no se trataba de reproducir la
familia argentina.
UN
NUEVO MONTAJE
A
PARTIR DE NOSOTROS
Lurdes
Barba, interpreta a Marta y reconoce que al principio…

FOTO: ALBERTO NEVADO |
- …había cierta presión por el montaje
hecho y que tuvo una acogida muy favorable. Me ha sorprendido que en el
trabajo Javier se olvidó de aquel montaje y todo lo
demás y comenzó a construir este montaje a partir de nosotros. No estaba
reproduciendo lo anterior, como se suele hacer cuando se retoma una obra.
Es como si Javier descubriera una serie de cosas. No sé
si lo simulaba o era verdad.
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- Nunca lo
sabrás – interrumpe Javier,
sonriendo.
- No había un referente – insiste Lurdes. Parecía descubrirlo con nosotros.
IMPORTA
LO QUE SE DICE,
PERO
TAMBIÉN CÓMO SE DICE
Francesc
Lucchetti es Salvador
- Es la segunda vez que
trabajo con Javier – La felicitat (2006),
texto y dirección de Javier Dualte -, y yo creo que en los
textos y obras de Javier es tan importante el cómo se dicen las cosas que lo que se dice. Cómo nos hace contar la
historia más que la historia en sí misma. Es tan entrañable, tan
original que lo hace distinto de otros autores y dramaturgos en que he
intervenido y esto es importantísimo. Es una manera especial suya de
contar las cosas como dramaturgo y como director. Yo me lo he pasado
bomba. Me lo pasé con
La
Felicitat y ahora con esto. Lo importante
es, por parte nuestra, es
cómo llegar a la
sensibilidad del espectador.
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FOTO: ALBERTO NEVADO |
El juicio global que Luccheti hace de la obra es:
- La historia no es extraordinaria, pero
sí es extraordinario el modo de contarla.
Me gustaría
que se dijera de mis obras
que no se parecen entre sí.
Javier
Dualte aludía a que con Nunca
estuviste tan adorable se enrolaba en el teatro de siempre incluido telón,
pieza a la que había renunciado en todas sus obras anteriores. El que siga en
esta línea no lo sabe Javier,
porque…
- …no sé cuál es
mi línea. No necesariamente tengo que seguir con este tipo de teatro.
Ahora, en mi cabeza, tengo otra cosa. Me gustaría que se dijera de mis
obras que nos e parecen entre sí.
Anunciado el nuevo proyecto, surge la curiosidad de por dónde va.
- No, no lo voy
a contar – concluye Javier.
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