.:: Entrevista ::.

PINK FLOYD BALLET
de
ROLAND PETIT



ROLAND PETIT EXTRAE SU INSPIRACIÓN DE LOS PROPIOS BAILARINES
ASÍ LAS COREOGRAFÍAS SE CONVIERTEN
EN TRAJES HECHOS A LA MEDIDA DEL PROPIO BAILARÍN.

Llega al Teatro Matadero de Madrid Pink Floyd Ballet con coreografía de Roland Petit. Se trata de una fusión de diverso lenguajes lingüísticos: danza contemporánea, ballet clásico y breakdance. Esta experiencia comenzó en 1973, cuando Roldand Petit se interesó por la música de los Pink Floyd. La versión de este 2006 – reestrenada en febrero de 2004 en Japón y revisada por el propio Roland Petit - posee mayor cantidad de temas y como novedad la incorporación del breakdance con el tema Run like hell.
 
La interpretación corre a cargo de la compañía Tokyo Asami Maki Ballet, cuyo director artístico es Kyoto Mitani. Como estrellas invitadas trae a la española – musa de Petit – Lucía Lacarra y a Cyril Pierre, ambos estrellas del Ballet de la Ópera de Munich.

En opinión de Manuel Gutiérrez – director de los Veranos de la Villa – la venida de este espectáculo supone:

  • La propia coreografía del propio Roland Petit, que es uno de los coreógrafos de la danza mundial. Su ausencia se debe a la pasada huelga que no le garantizaba poder regresar en el momento oportuno para atender a una serie de responsabilidades familiares.

Otro de los alicientes es la presencia de la bailarina española Lucía Lacarra.

  • Es estrella y musa de Roland Petit, así como lo es mía también. Nos tenía olvidados ya que hace tres años que no actuaba en España.

Un tercer elemento de fascinación es para Manuel Gutiérrez la música de Pink Floyd.

  • Es una música tan especial para tantas generaciones.

Por último, está la compañía Tokyo Asami Maki Ballet que celebra su 50 aniversario.

  • Esta compañía – aclara Manuel Gutiérrez es la primera compañía de ballet clásico en Japón.

LA TOKYO ASAMI BALLET
PRIMERA COMPAÑÍA DE CLÁSICO
EN JAPÓN

 
La Compañía Tokyo Asami Ballet se creó en 1956 por la bailarina y coreógrafa japonesa Akiko Tachibana y su hija Asami Maki, que es la actual presidenta. Su sede está en el teatro NHK Hall de Tokyo y trabaja bajo los auspicios de la Agencia de Asuntos Culturales de Japón y la Japan Foundation.

Cuenta con un repertorio de más de 150 obras que se reparten entre ballets tradicionales japonese de Akiko Tachibana, los grandes clásicos occidentales y coreografías más actuales de Balanchine, Rudy van Dantzig, Forsythe y Nacho Duato.

Desde el año 2001 comenzó sus colaboraciones con Roland Petit a partir de la creción de Duke Ellington Ballet con música de Duke Ellington. Después siguieron otros ballets de R. Petit:

Notre-Dame de parís
L’Arlesienne
Tout Satie
Le Jeune Homme et la Mort
Pink Floy Ballet (2004)

KYOZO MITAMI
BAILARIN, COREÓGRAFO Y
ACTUAL DIRECTOR ARTÍSTICO


Kyozo Mitami (Ehime, Japón) es su director artístico. Inició sus estudios de ballet en su pueblo, en Tokyo y en la Académie de Danse Classique Princesse Grace en Mónaco.

Vuelto a Tokio, en 1979, ingresó en la Asami Maki Ballet Tokio, como primer bailarín. Representó lo protagonistas clásicos: El lago de los cisnes, La bella durmiente, Cascanueces, Don Quijote, Raymonda, Coppélia, La Bayadera, Los Cuentos de Hoffmann, La Sílfides, Giselle…. Recorrió Reino Unido, Francia, Rusia, Italia, Israel y Portugal.

En 1994 es elegido director artístico y coreografía Persona (1993), Pendule (1995), Gershwin’s Dream (1997), Accident (1998), Variation pour Quatre (2000), Cascanueces (2001), versión esta última que se representa todos los diciembres por todo Japón. Ha recibido diverso premios y participa como juez en competiciones internacionales.

Con motivo del 50 aniversario de la Compañía ha creado A Bientot, un espectáculo que combina ballet clásico y tradicional japonés, dedicado a la familia imperial japonesa.

Su llegada a Madrid le supone:

  • Un gran placer al estar rodeado de Lucía Lacarra y los demás compañeros. También porque puedo presentar a mi Compañía y, por vez primera en Madrid, la coreografía de Roland Petit. Es un buen modo de celebrar nuestro 50 aniversario.

LUCÍA LACARRA:
LA MUSA DE ROLAND PETIT

 
Lucía Lacarra (Zumaia, País Vasco) – primera bailarina de la ópera de Munich y Premio nacional de Danza 2005 – es el espíritu de la danza y parece de porcelana. No es frecuente verla bailar en España, desde que se marchó a Marsella en 1994 para trabajar en el Ballet Nacional de Roland Petit, que califica como “genio de la danza” Tal admiración ha sido correspondida, porque Roland Petit no solamente la ha convertido en su estrella sino en su musa y crea para ella: Bolero, El Gatopardo, Et la Lune y Mere Mediterranee. En los tres años que permaneció en su compañía
  • He aprendido, sobre todo, a estar emocionalmente presente en el escenario, y que todo se baila de una manera más que técnicamente clásico.

A Roland Petit no lo ha olvidado y colabora como estrella invitada con aquellas compañías que estrenan los ballets del coreógrafo. En España se prodiga muy poco.


LUCÍA LACARRA/CYRIL PIERRE

  • La última vez fue en el 1999 o el 2000, invitada por Víctor Ullate en el teatro Madrid y después fuimos de gira. He tenido la suerte de bailar en España, pero sólo en galas. En San Sebastián es más fácil, porque al ser mi casa, las crea para que yo venga. No hay muchas oportunidades para bailar en España, ya que no hay clásico. Sí en París o Berlín y otros países en las que hay compañías de clásico.

Esta venida a España con la compañía japonesa la valora.

  • Es un placer enorme poder estar aquí bailando en Madrid. Madrid ha sido mi cuna en el Ballet de Víctor Ullate, al que aprecio mucho. Volver es volver a mis inicios en la danza. Es también una gran alegría poder bailar las coreografías de Roland Petit y por ello es una experiencia maravillosa el que me haya invitado la mejor compañía japonesa de ballet. Son muy profesionales. Muestran una gran pasión por el trabajo y la danza, algo que yo también comparto. Además, me siento muy acogida en el seno de la Compañía.

Ese amor por el sacrificado trabajo preciso, es lo que le impulso a sus 14 años el dejar su tierra y venir a Madrid. La Escuela de Victor Ullate, una de las más prestigiosas, fue su norte. En 1990 obtenía su primer contrato en la Compañía de Víctor Ullate como primera bailarina en el Ballet de la Comunidad de Madrid.

Si Lucía admira a Víctor, éste no le va a la zaga. Cuando se le pregunta por ella manifiesta que.

  • Había una gran sintonía. Bastaba una mirada de ambos para saber lo que queríamos en tal o cual paso. Lucía es la danza en estado puro.

Ese afán de superación le ha llevado a abrirse a otros estilos de baile. Así en 1997 va a EEUU y se integra en el San Francisco Ballet como primera bailarina e interpreta a los neoclásicos y contemporáneos: Forsythe, Robbins, Duato y Balanchine. Desde el 2002 radica en el Ballet de la Ópera de Munich, donde es bailarina estelar. En esta compañía ha podido conjugar la danza y su dimensión emocional. Cyril Pierre es su pareja profesional y sentimental, el cual también lo es en esta coreografía.
 

LUCIA LACARRA/CYRIL PIERRE
  • Me alegra venir a Madrid – confiesa Cyril -, pues tras vivir 12 años con Lucía, sé lo importante que es. Una alegría más se añade, la de interpretar a Roland Petit ya que yo crecí con sus coreografías. Y quisiera dar las  gracias a Kyoto Mitami, por haberlo hecho posible y por invitarnos durante muchos años a bailar en su Compañía. Espero que Madrid disfrute de este espectáculo.

En esta ocasión Lucía y Cyril actúan como estrellas invitadas, pero en otras ocasiones son los primeros bailarines de la Compañía los que toman el relevo.

  • La compañía tiene muy buenos bailarines que pueden bailar perfectamente lo nuestro. El que seamos invitados y no solamente ahora, se debe a que es interesante el que sus bailarines tengan una imagen que les motive a base de comparaciones. Cualquier bailarín lo hará de forma diferente y les podrá aportar algo. Lo mismo para nosotros. En este caso al venir a España, tenía mayor sentido el que yo viniera. Y para mí ha sido una oportunidad de encontrarme con los míos.

LA VERSIÓN DE 2004,
NUEVAS COREOGRAFÍAS


La versión de 2006 es la misma que la del año 2004. Hubiera podido ser revisada de nuevo, pero debido a las circunstancias familiares repentinas de R. Petit, según Jan Broeckx, colaborador de R. Petit:

  • Ha sido difícil cambiar algo. Así que en ese sentido el ballet es el mismo del año 2004, al que se le añadieron nuevas piezas, quedando en un total de 12. Cuando la concibió en 1972 trabajó con Pink Floyd unos 30 minutos de coreografía. Luego fueron desarrollando el disco, que se añadió al ballet. Lo importante es que eran temas actuales y estaban a la altura de su tiempo. A lo largo de estos años fue evolucionando sobre la base que se sigue manteniendo. Para la compañía japonesa ha creado dos piezas.
Desde el 1972 se ha seguido bailando. Cyril Pierre se incorporó a esta coreografía en el año 1992 y Lucía en el 1997. La coreografía había entrado a formar parte del repertorio. Con motivo de la versión del 2004 y al ser Lucía la estrella invitada por la compañía japonesa creó para ella el Pas de deux de la canción The Great Gig in the Sky (álbum The Dark Side of the Moon), que es crucial en la historia del rock. Hubo también una novedad cualitativa: el estilo break dance como contraste al ballet clásico.

SLYDE LLAMADO
CON SU BREAKDANCE
A FORMAR PARTE DEL BALLET


Slyde es el nombre artístico de Sylvain Le Hersan (París, 1972). De padre guineano y madre bretona, a los 12 años se interesó por la gimnasia deportiva y, pronto, participó en competiciones deportivas. Es en 1986 cuando descubre el estilo break dance y contacta con el mundo de la acrobacia. Trabajará en un espectáculo de calle que girará por toda Francia. En 1997 forma parte de la compañía Dan’s Aver y ello marcará su vida artística. Crea una danza que suma la acrobacia, el street dance (la danza de calle) y capoeira.

La coreógrafa española, radicada en Francia, Blanca Li lo descubre en 1998 en las audiciones del Festival Suresnes Cités Danse y lo contrata para Macadam-Macadam, que llegará a tenr 150 representaciones por la Ópera Comique (París), Francia, Europa y EEUU.

La inquietud creativa le lleva a Slyde a crear lo que ha llamado el estilo Lyrix: mezcla el street dance, la capoeira y el manejo equilibrista del sombrero y el bastón.

Es en el 2004 cuando Roland Petit lo descubre en una actuación por las calles de París. Crea para él la pieza Run Like Hell, dentro del Pink Floyd Ballet. Creará también el solo Le Falcon, para el espectáculo: Roland petit: Raconte ou Les Chemins de la Creation.

EL HIP-HOP
CARTA DE NOBLEZA.

 
Slyde posee un talante divertido, comunicativo y tiene un especial modo de probar el micrófono. No es 1,2,3 … 1,2,3 sino a base de rítmicos efectos sonoros que salen de su garganta.

  • Es una experiencia estupenda – confiesa Slyde -, que al Hip-Hop se le haya dado una carta de nobleza y se le haya llevado al nivel del clásico. Es una mezcla muy interesante. Ya en 1972 cuando a R. Petit se le ocurrió mezclar el clásico y el rock, revelaba su gran poder reinnovación. Y siguiendo esa misma línea en Tokyo al ver el Hip-Hop en la calle, volvió al espíritu de 1972: una nueva incorporación. Clásico, Rock y break dance.

Slyde declara que al encontrarse con R. Petit sintió, intuitivamente, que algo les unía.

  • La parte que bailamos nosotros, ha surgido de manera intuitiva, ya que es el método de trabajo de Roland Petit, al aunar música y corazón y sugerir sensaciones. Ahora se ha hecho igual.
  • Quiero añadir - declara Jan Broeckx que Petit es un auténtico genio. Puede trabajar con todo tipo de estrellas, bailarines y tanto en Hollliwood como en París. Trabaja con la danza contemporánea, el clásico, ahora con el Hip – Hop. No hay nadie que trabaje con tantos elementos. Y hay algo más, su inspiración la extrae de los bailarines, con lo cual las coreografías se convierten en trajes hechos a la medida del propio bailarín.

La música rock de los Pink Floyd es tratada balletísticamente de forma clásica.

  • Nuestro baile es clásico – confirma Lucía en toda la coreografía. Hay tres pasos a dos que son muy diferentes y yo siempre trabajo en puntas. No se da uno cuenta de esta mezcla de música y paso clásico. Ves que puedes bailar danza clásica con cualquier música. No de tas cuenta.

Slyde puntualiza acerca del rock

  • El rock es una forma de vivir la vida y no sólo de bailar. Ves la vida desde esa perspectiva independientemente de la danza. Hay un estilo rockero de enfrentarnos ante el espectáculo y lo hemos vivido todos de la misma manera.


José Ramón Díaz Sande
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