 |
DANZA EN EL CENTRO CULTURAL
DE LA VILLA DE MADRID
PSITT!! PSITT!! / CARAVAN
GELABERT AZZOPARDI CÍA. DE DANSA |
Título: Psitt!! Psitt!!
Música: Pascal Comelade, a partir de Eric Satie.
Músicos: P. Comelade, G. Meloux, O. Marques, E. Tozoni.
Título: Caravan.
Música: Duque Ellington.(interpretada por Chet Baker,
Doctor
John, The Neville brothers, Lester Bowie,
M. Semé, E. Pantoja,
E. Altaba)
Coreografía / Concepto: Cesc Gelabert.
Iluminación: Baltasar Patiño.
Vestuario: Lidia Azzopardi.
Sonido: Quim Isern
Fotos: Ros Ribas.
Compañía residente del Teatre Lliure: Gelabert-Azzopardi,
Companya de Dansa.
Coproductores: Teatre lliure Gelabert
Azzopardi
Bailarines: Carlos Fernández, Cesc
Gelabert,
Iker Gómez, Alberto Huetos,
Noelia Liñana,
Maureen López, Caliope
Paniagua.
Estreno en Barcelona: Teatre Lliure,
marzo 2005
Estreno en Madrid: Centro Cultural de la
Villa
(Veranos de la Villa), 23 – VII - 2005 |

PSITT!!PSITT!!

CARAVAN
C. GELABERT/ CALIOPE PANIAGUA
FOTO: R. RIBAS. |

PSITT!! PSITT!!
NOELIA LIÑANA/IKER GÓMEZ |
Cesc Gelabert se presenta con dos coreografías Psitt!! Psitt!! y
Caravan. Aproximadamente una media horita para cada una. Hay un
término que une a las dos coreografías: “amable”. Por “amable”,
entiendo que se ven con gusto y ello por varios motivos. Uno, es
la precisión de todos los bailarines en una serie de
desplazamientos, ahora independientes, ahora conjuntados para
volver a recuperar la independencia cada uno y todo ello en un
fluido ir y venir. Otro, el vestuario, sobre todo en Psitt,
Psitt de valor altamente teatral como parecer requerir la pieza.
Y por último, el mágico logro de conectar con el espectador, sin
que nos encontremos con tiempos muertos. Cada movimiento, cada
desplazamiento aboca hacia otro nuevo y así sucesivamente. En
contrapunto con todos los bailarines el propio Gelabert, que, en
ambas coreografías, recurre al tiempo de cámara semilenta,
intriga y como quien mueve los hilos de todos esos
bailarines-marionetas. Tanto en una como en otra, prescindiendo
del contenido específico de cada una, hay como una segunda
lectura. El coreógrafo que es Cesc Gelabert vigila y maneja los
hilos de sus bailarines, y esto con un matiz casi demiúrgico.
Psitt!! Psitt!! se crea a partir de la partitura musical de
Pascal Comelade que a su vez – según programa de mano – quiere
ser un homenaje particular a Eric Satie, en la que se inspira.
Las anotaciones de Satie en los márgenes de la partitura (según
parece para orientar o desconcertar al intérprete en cuestión),
también son fuente de inspiración para la composición musical y
para la coreografía. Desde el principio, a través de un
sugestivo vestuario de la Azzopardi - floreado, apolisonado en
ellas y altamente teatral - nos sumerge en un mundo de circo,
feriantes o similares. Incluso en el mundo de las marionetas. El
lento desplazamiento de Cesc – a veces de maléfica mirada –

CARAVAN
MAUREEN LÓPEZ/CARLOS FERNÁNDEZ |
en
unos discretos movimientos y pasos son de una gran sugerencia y
viene a ser como aquel que mueve los hilos. Hay toques teatrales
y reminiscencias cinematográficas barnizadas de una poesía
surrealista en muchas ocasiones. A ello se une un toque
melancólico y gotas de humor, que después irradiarán todos los
intérpretes en el saludo final mediante una amplia sonrisa que
huele a complicidad. Hay un buen trabajo sobre el espacio en las
líneas que se crean entre unos y otros, unas veces asincrónicas
y otras más convencionales. Toda la pieza rezuma suavidad.
Caravan toma el título de la pieza jazzística de Duque
Ellington. El coreógrafo ha declarado que esta coreografía “es
una celebración a la individualidad de la personalidad distinta
de cada bailarín mientras contempla su cuerpo y su identidad”.
Ésta, indudablemente, puede ser la parte externa coreográfica,
pero sin este dato el mundo que Caravan no sugiere es el del
asilamiento humano. Cada personaje, aunque todos estén en
escena, vive su mundo solipsísticamente y poco a poco comienzan
a integrarse en grupo, formando unos movimientos hacia delante
que rápidamente deshacen fluidamente, de una gran belleza. Es
una coreografía muy a merced de las posibilidades balletísticas
de cada uno de los bailarines, hasta el punto que, imagino, es
un trabajo muy pormenorizado y muy personal.
Si algo puede definir a las dos coreografías es el depurado y
preciso movimiento de cada bailarín a nivel individual y coral.  |