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RINOCERONTE
de EUGENE IONESCO
en el TEATRO MARÍA GUERRERO de MADRID
Del 17 de diciembre de 2014 al 8 de febrero de 2015
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Rinoceronte (Rhinocéros, título original en francés, 1959) se estrenó en España el 13 de enero de 1961, en el Teatro María Guerrero con el título El Rinoceronte, y dirigido por José Luis Alonso. Esta obra dio a conocer mundialmente el nombre de Ionesco, su autor. Con Rinoceronte Ionesco ingresaba en el llamado del teatro del absurdo.
El estreno en Madrid, dos años después de su estreno en Francia, fue recibido con disparidad de opiniones. Hubo pateos y pitos, proveniente del patio de butacas, y bravos desde el gallinero, acusando a los de abajo de "rinocerontes".
CINCUENTA Y CUATRO AÑOS DESPUES...
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FOTO: VALENTÍN ÁLVAREZ |
Tras 54 años vuelve al Teatro María Guerrero de la mano de Ernesto Caballero. El acudir a este título es porque es
- un clásico del teatro contemporáneo, un clásico del teatro europeo del s. XX, y es una gran monumento a la voluntad. Por otro lado lo vi adecuado por la vigencia de la temática que plantea: el conflicto entre la conciencia individual y la masa o el pensamiento hegemónico, que termina abduciendo al individuo hasta diluirle en una masa, y, por tanto, despojándole de su condición de persona. Ionesco escribió este texto como una parábola muy crítica contra los totalitarismos que le tocó sufrir. En concreto el soviético en su Rumanía natal, y más tarde la ocupación nazi en Francia.
Esta inmediata exigencia de denuncia existencial se convirtió en algo más universal y Ernesto recuerda que el propio Ionesco
- vio que la obra transcendía la primera anécdota que le impulsó a escribirla, iba más allá: escribía una reivindicación sobre la individualidad, y así lo manifestó.
La impronta del texto en el 1961, se vio alimentada porque en aquella época, el teatro era uno de los pocos foros donde se podía entablar un debate. Aunque catalogada como Teatro del Absurdo, Ernesto recalca que
- en ningún momento me he referido a esta obra como Teatro del Absurdo. Es realismo. Una de las grandes razones por las que Ionesco ha pasado batería es porque es una obra realista, aunque con un realismo desplazado, si se me apura. Es una obra profundamente realista, porque el realismo de la época estaBA hiperideologizado. Los personajes realistas en la tradición ibseniana eran portadores de un discurso, y eso, ahora mismo, les ha hecho, un poquitín, que el traje sea encorsetado, no respiran el humor..., pero, hoy en día, ese discurso existencialista que Ionesco toma, forma parte de nuestros disfraces. Los personajes cogen el discurso de un muestrario preestablecido, para ser. Eso es muy vigente. Por eso hemos rehuido la farsa guiñolesca que propone Ionesco. Él decía vamos a teatralizar el teatro. No hemos seguido ese camino, porque la teatralización ya está instalada en la calle.
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FOTO: VALENTÍN ÁLVAREZ |
PERDER LA DIGNIDAD HUMANA
En este 2014/15 Ernesto ha reunido una Compañía, presidida por Pepe Viyuela como el protagonista Berenguer, el único que no se convierte en Rinoceronte.
- Berenguer no es un resistente romántico o heroico, sino que es un hombre común, sin grandes convicciones. No ideologizado, é mismo dice que no tiene gran formación cultural. Es un poco desastre en su vida y un poquito aficionado a la botella. O sea, Ionesco nos está diciendo, como la película Ratatouille, que las reservas éticas están en los lugares más inopinados, no en los grandes discursos. La obra está llena de grandes personajes plagados de grandes enunciados, casi regeneracionistas a los que se les va la fuerza por la boca. Progresivamente se van convirtiendo en rinocerontes. Berenguer no tiene esa pretensión y en un momento dado dice que instintivamente sabe separar lo que es dejarse llevar por la corriente y perder la dignidad humana. Se queda más solo que la una, pero con sus convicciones.
NO REACCIONAR A TIEMPO
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FOTO: VALENTÍN ÁLVAREZ |
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Otra lectura que ofrece Ernesto es que
- Berenguer no ha reaccionado a tiempo. Cuando aparecen los rinocerontes en la ciudad, no le da importancia a este fenómeno, hasta que los tiene en su propia casa: su amigo, su novia, en su trabajo. Así lo hemos querido ver y subrayar en esta versión. Muchos de los fenómenos rinocerónticos que nos asolan hoy en día, tal vez se deban a que se vieron venir, pero nadie, los berengueres que en el mundo son o hemos sido, no reaccionamos a tiempo. Cuando quiere reaccionar Berenguer, tiene el rinoceronte, literalmente, encima. La facilidad con la que tendemos a adhesiones vehementes, temperamentales hacia causa que corren el riesgo de anularnos o anular nuestra conciencia individual. Por tanto nuestra libertad.
A pesar de estas dos interpretaciones, Ernesto cree que la obra
- es compleja. Suscita muchas preguntas,. Nuestro objetivo ha sido suscitar todas esas preguntas, que en un juego teatral delirante, divertidísimo, el espectador salga preguntándose ¿qué parte tengo yo de Rinoceronte? ¿Dónde están los rinocerontes en la sociedad? y ¿Qué hacemos antes este fenómeno?
BERENGUER, UN HÉROE A SU PESAR
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FOTO: VALENTÍN ÁLVAREZ |
Pepe Viyuela, popular donde los haya y muy a la mano de los espectadores televisivos por su interpretación en la serie televisiva Aida, nunca olvida el teatro.
- Desde que comenzamos los ensayos vimos que cuando más se profundiza en la función, es más rica y más sugerencias se encuentran. Es interesante porque puedes llegar a perderte en ella y tienes que elegir caminos. Ionesco no te lo da hecho. Habrá una función por cada espectador, porque la reivindicación latente del individuo en la función se plasma en ver lo que cada uno de nosotros somos dentro de ese juego que plantea Ionesco. Están los rinocerontes, la masa ,lo que no arrastra y atrae con fuerza, nos seduce y nos hace que dejemos de pensar por nosotros mismos, aprender discursos al dictado en lugar de preparar nuestras propis respuestas ante las cosas. Luego están las posiciones intermedias, en las que uno parece no ser un rinoceronte, pero lo es sin saberlo. Está esa pequeña resistencia, ya casi entregada a la corriente. Están también los berengueres, esos seres que tampoco son salvados, porque Berenguer no es un héroe. Si lo es, lo esa su pesar, porque no ha decidido ser un líder. Ni alguien que convenza. Sencillamente tiene una moral, una ética personal que choca contra aquello que parece quiera arrastrarle. Hay un momento en que duda de dejarse arrastrar por la corriente. quizá lo que reivindique no es tanto el papel del individuo, como el papel de esa ética que a todos nos tocas insuflar a aquellas nuevas generaciones que llegan. Probablemente no son los individuos que nos salven, sino esa sensación que hace que Berenguer no pueda verse arrastrado por la corriente que es lo que ha recibido durante toda su vida, que le ha llevado a ser un borrachín, descontento con la vida, que no sabe vivir en sociedad, pero tampoco sabe estar solo. Desde que se levanta por la mañana está descontento porque no le gusta su trabajo. Es incapaz de decir a la mujer que ama, que la quiere.
UN HÉROE ANÓNIMO COMPAÑERO DE VIAJE
La conclusión de este análisis es que
- Berenguer es un ser bastante desastroso. Ionesco parece decirnos que con ese ser desastroso, quizás la referencia más inútil, dentro de esa alma desprovista de armas está el ser más capaza de resistir, por esa virtud en no creerse nada, sino en hacerse preguntas constantemente y cuestionarlo todo. En tener una individualidad, un lugar que por muy movedizo que sea, es el suyo. No reivindica más que eso: el pensamiento libre y la capacidad para ser crítico desde el lugar que cada uno ocupa. Si ese héroe existe, probablemente sea una héroe anónimo., oculto en esos ciudadanos con los que nos cruzamos cada día y que no nos impresionan para nada, pero son realmente nuestros compañeros de viaje.
EL RINOCERONTISMO ESTÁ PRESENTE EN TODOS LOS ÁMBITOS
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FOTO: VALENTÍN ÁLVAREZ |
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Pepe Viyuela cree que en la actualidad los rinocerontes existen en cuanto que
- el individuo sigue necesitando hacer un esfuerzo para encontrar una perspectiva personal de las cosas.Elrinocerontismo está presente en todos los ámbitos: la política, la cultura, la publicidad, en el consumo...¿Quién no tiene un teléfono móvil hoy en día? Si no lo tienes eres un bicho raro. No nos planteamos muchas de las cosas que nos pasan. Existen otros como las mayorías absolutas o vientos políticos que llegan desde cualquier sitio y no nos cuestionamos demasiado. Lo abrazamos por un pasión o necesidad de cambio. Cuando damos un paso hacia algún sitio, generalmente, no solemos pensar por qué lo damos. Nos empuja una masa o la corriente de opinión. Aquí está la grandeza de la función, porque aunque esté inspirada en un hecho histórico, medio siglo después tiene una vigencia sorprendente. Asusta, incluso.
VERSIÓN REVISADA
Para el texto se ha hecho manos de varias traducciones con asesoramiento de Odile Bouchut una filóloga cuyo trabajo Ernesto lo califica de
- extraordinario. He limpiado muchas referencias y fórmulas de cortesía de la época; he eliminado algunos personajes secundarios; todas las acotaciones que indican una farsa guiñolesca, que hizo furor en los años sesenta, he hecho un trasvase a una realidad más cercana. La plaza del pueblo la he convertido en el propio espacio de representación, es decir, no hay figurantes sino que es el propio espectador el que está en vuelto en la trama.
LAS ESCALERAS DE ESCHER
La escenografía de Paco Azorín está construida con una serie de escaleras que no llevan a ninguna parte y huye de espacios más realistas.
- Alude a ese mundo kafkiano y a las escaleras de Escher- escalera imposible o infinita. Soy poco dado a las traslaciones literales, porque el símbolo no es susceptible de una traslación literal, pero, evidentemente, remite mucho a todas esas idas y venidas de los personajes, porque algunos se transforman emocionalmente, pero muchos otros lo justifican teóricamente. Son cofrades de "entiéndeme tú a mí". Si otro lo hace, por qué no lo voy a hacer yo. todos esos meandros discursivos van muy bien con esa estructura de idas y venidas.
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ESCALERAS DE ESCHER |
La idea de la escalera, según Ester, ya está en el original, pues el rinoceronte que le persigue está en la escalera, la cual viene a ser como un puentey se convierte en Metáfora.
- Una de las primeras cosas que el rinoceronte destroza es la escalera y les impide bajar a los personajes - concluye Ernesto.
Las connotaciones que tiene la escalera es incomunicación porque no llevan a ninguna parte, jaula pues los que pasan a ser rinocerontes pasan a ser parte de esa escenografía móvil.
- Acosamos a los personajes que todavía viven en el interior - añade Ester.
La idea de tal artilugio escalera, según Ernesto
- no tienen propiedad intelectual en el teatro. Aparecen. El director abona el terreno y siembra para que las ideas aparezcan. Surgen de una conversación, pero ¿quiénes tienen el copyrigth de la escalera?, pues supongo que Paco Azorín, pero todo surge a largo de la creación colectiva.
DE LA ALUCINACIÓN AL RINOCERONTE CORPORAL
A nivel plástico la máscara de Rinoceronte era uno de los elementos cruciales. En la versión actual la aparición es progresiva.
- Al principio - desvela Ernesto - puede ser una alucinación colectiva. A medida que progresa la acción anulamos el rostro a los actores, pues pierden su identidad y al final aparece el propio bicho en todo su esplendor.
Para poner en pie esta obra Ernesto ha contado con lo que define como
- un equipo de lujo en cuanto colaboradores y actores. Es una producción muy cuidada en lo que hemos puesto lo mejor de nosotros mismos.
FUNCIÓN De martes a sábados: 20:30 hrs. Domingos: 19:30 hrs.
ENCUENTRO CON EL PÚBLICO Sábado 17 de enero de 2015
TEATRO ACCESIBLE
Discapacidad auditiva y visual Jueves 8 y viernes 9 de enero de 2015
PRECIO De 24 € a 4 €
Descuento Mayores 65 años: 50%
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FOTO: VALENTÍN ÁLVAREZ |
Título: Rinoceronte Autor: Eugène Ionesco Versión: Ernesto Caballero Asesora filológica: Odile Bouchut Escenografía: Paco Azorín Vestuario: Ana López Cobos Iluminación: Valentín Álvarez Música y espacio sonoro: Luis Miguel Cobo Movimiento escénico: Marta Gómez Ayudante de dirección: Víctor Velasco Ayudante de escenografía: Juan Sebastián Domínguez Ayudante de Iluminación: Carlos Díaz Llanos Ayudante de vestuario: Beatriz Robledo Puertas REALIZACIONES Escenografía: Mambo Decorados Ambientación escenográfica: Sfumato Máscaras: Asier Tartás Ambientación vestuario: María Calderón Arreglos vestuario: Rafael Solís Agradecimientos: Compañía Nacional de Teatro Clásico Diseño cartel: Isidro Ferrer Fotos: Valentín Álvarez Producción: Centro Dramático Nacional Intérpretes: José Luis Alcobendas (Dudard), Ester Bellver (La señora Boeuf), Fernando Cayo (Juan), Bruno Ciordia (El de la tienda), Paco Déniz (El lógico), Chupi Llorente (La de la tienda), Mona Martínez (La mujer que va de compras), Paco Ochoa (El dueño del bar / El bombero), Fernanda Orazi (Daisy), Juan Antonio Quintana (El señor mayor), Juan Carlos Talavera (El señor Papillón), Janfri Topera (Botard), Pepe Viyuela (Berenger), Pepa Zaragoza (La camarera) Dirección: Ernesto Caballero Duración del espectáculo: 2 horas aprox. (sin intermedio) Estreno en Madrid: Teatro María Guerrero (CDN), 17 - XII - 2014
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Centro Dramático Nacional Teatro María Guerrero Director: Ernesto Caballero C/ Tamayo y Baus, 4 28004 – Madrid Metro: Colón, Banco de España, Chueca. Bus: 5,14,27,37,45,52,150 RENFE: Recoletos Parking: Marqués de la Ensenada, Pz de Colón, Pza del Rey. Tf. :91 310 29 49
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