ENFRENTADOS FLEXIBILIZAR A LA IGLESIA
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En 1980 se estrenaba en Broadway un texto que acumularía una serie de Premios y repuesta actualmente en los escenarios de todo el mundo.
EL PAPA FRANCISCO DA VIGENCIA A ESTA COMEDIA
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La vigencia la expresa C. G-LLano, el adaptador de este texto para España:
- La figura del Papa Francisco ha hecho que el contenido de esta comedia, - tan llena de humor e ironía, como de situación, texto y pensamiento -, tomara vigencia e interés renovado que hacía preciso si no una adaptación, sí al menos una “revisión”.
Arturo Fernández, que encarna al Padre José María, define Enfrentados como
- una comedia llena de ironía, de humor por parte del sacerdote y por parte del seminarista, que con veinte y tantos años, como es lógico, quiere cambiar la iglesia actual y hay una oposición jerárquica que se opone, que, entre otras cosas, produce muchísima ternura y dramatismo, porque cuentan su vida el sacerdote y el seminarista y es verdaderamente acogedor.
La chispa del conflicto salta cuando se enfrentan el Padre Jose María (Arturo Fernández), un párroco con bastante de "glamour", con el seminarista Tomás de la Casa (David Boceta). Les separa la edad y la visión del mundo
- Llego a la parroquia porque nuestro obispo es íntimo amigo de él - desvela David Boceta. Sabe que yo pongo el grito en el cielo con el tema de las mujeres. Una mañana de domingo su sermón va a tratar ese tema. El obispo me manda allí. Entonces en cuanto lo oigo, salto desde la iglesia, y se forma la primera bronca, pero es casi un juego entre el Obispo y él, y me utilizan a mí.
ENFRENTAMIENTO IDEOLÓGICO Y VISUAL
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El enfrentamiento es ideológico, pero también visual.
- En la vida real soy padre de tres hijos, pero en el escenario soy el Padre José María - declara Arturo Fernández. Es un personaje que me encanta por su humanidad, su ironía, con un sentido común fantástico. Socarrón, propio de un hombre de su edad. Un personaje con el que los espectadores se ríen muchísimo, por su sentido del humor. Además en el público se crea un sentimiento de ternura por la soledad. Nadie sabe de la soledad del los sacerdotes que tienen muchísima. Mi personaje es muy actual, comprensivo con todo, pero, qué duda cabe, que las normas y las reglas de la Iglesia no se pueden cambiar después de 2000 años que lleva la Iglesia Católica. Es un sacerdote que cuida su manera, pero hay un momento en la vida de toda persona que tiene que cambiar su manera de ser, pero él hará cambiar, también, al seminarista. Cambiar su forma de ser. Es un encuentro entre los dos que empieza muy explosivamente.
Enfrentarse a este personaje Arturo lo ve como
- un reto porque es un cambio, aunque existe la carcajada, por la ironía de este sacerdote que es fantástico. Como he dicho le gusta mucho el vino, y con eso ya está todo dicho. Es una persona fenomenal.
UN ESPACIO ECLESIAL LLENO DE LUZ
Nada más levantarse el telón y contemplar la escenografía: la iglesia y la sacristía, se intuye un cierto "glamour", que se confirma cuando el Padre José María aparece con su impecable "clerygman" y su elegancia en los movimientos, muy propio de otros personajes interpretados por Arturo
- El "glamour" está presente, se trate de un personaje sacerdote o de un empresario en la forma de interpretar, pero sí no aparto el "glamour" en este personaje es porque es un sacerdote que le gusta vivir estupendamente bien. Le encanta el vino por encima de muchísimas cosas. Eso te predispone a que es un hombre muy abierto a todo. Le gusta la estética en todos los aspectos.
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El amor por la estética parece haberlo trasladado al espacio de la parroquia. Con sólo el entorno se intuye la psicología del personaje
- he intentado que no fuera una Iglesia como antigua. Está llena de luz, es blanca. Guarda algo de esa presencia americana que todo es bello, limpio y su sacristía, el otro decorado, es muy agradable para el público. Prueba de ello es que cuando se levanta el telón existe un murmullo grande en el público porque es sorpresivo ver toda una Iglesia con un púlpito. No es frecuente, y lo que no es frecuente es verlo en un empresario particular sin subvenciones, pero siempre repito que mi subvención es la amabilidad del público que viene a verme. Entonces todo lo que soy, si soy algo, se lo debo al público. Cada espectáculo mío procuro que sea superior si puedo al anterior
- Es cierto que la escenografía no es al uso de la mayoría de las parroquias españolas. Lo que tiene es que está en un barrio acomodado, pero el texto original es norteamericano. Esta historia no se desarrolla en Madrid, pero sí en España. No se nombra el lugar, pero sí se habla de unos conceptos que nos traen a España: vino de Rioja, pero poco más. De todos modos podría desarrolarse en EEU aunque se beba vino de Rioja.
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EL PADRE JOSÉ MARÍA CON AROMA DE OTROS PERSONAJES DE ARTURO
En la construcción de su personaje ha habido toda una elaboración, y existe un cierto aroma de los personajes anteriores en sus comedias.
- En este personaje me he sentido muy cómodo, porque quieras que no los actores siempre llevamos algo de nosotros mismos . El mero hecho del "clerygman", te das cuenta que puedes llevar una corbata también. Lo que ocurre es que la forma de expresión de un sacerdote es muy distinta a los personajes que yo he podido interpretar que pueden ser infiel a su pareja etc...
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Por contraste Tomás de la Casa viste un chandal y todo es más desenfadado. Tal contraste no pasa desapercibido para el padre José María que le espeta:
- P. José María: Dígame ¿este es el nuevo uniforme de los seminaristas? - Tomás de la Casa: es.. mi ropa de correr - P. José María: Y ¿por qué corre Tomás? ¿Por qué corre? ¿Le persigue alguien?
- Tomás: corro 8 kilómetros todas las mañanas. Hoy ya he corrido la mitad. Si le parece termino y llego a la hora en punto.
MI SEMINARISTA ES DE AHORA Y CON LA SITUACIÓN SOCIAL ACTUAL DE LA IGLESIA
Enfrentados visualmente y enfrentados ideológicamente. A los finales de los años sesenta la Iglesia Española, en los jóvenes seminaristas, muestra un enfrentamiento con la Dictadura y comienza a romper normas y estereotipos dentro del propio seno de la Iglesia. Se olvida la sotana y se da un salto al traje laical, sin casi pasar por el "clerygman". El aval para tal comportamiento era el Concilio Vaticano II de Juan Pablo I. Tomas de la Casa, según David Boceta
- Va por esa línea, pero no está vinculado a un momento social de los años setenta en España. Mi personaje es de ahora, y con la situación social actual de la Iglesia Católica y del país. No es una persona políticamente comprometida como podría ser el movimiento del los años de reacción al franquismo. No se menciona la palabra política en esta función. Es una cuestión de fe, de que la Iglesia, que es mi personaje, necesita flexibilizar la estructura para poder seguir teniendo vigencia y para que la Palabra de Dios llegue al pueblo. En esto se diferencia, en que no se trata la cuestión política, y, también, en el contexto social en que se desarrolla.
- Es el problema de un chico seminarista que quiere cambiar la iglesia. Entonces se enfrenta a un sacerdote que lleva la parroquia más importante de un barrio importante de una ciudad cualquiera. Es un hombre conservador pero al mismo tiempo liberal. Le gusta muchísimo conversar con las feligresas. El vino le encanta porque es su vida . Dice que el primer milagro que hizo Jesus es convertir el agua en vino.
LA PRIMERA SOTANA DE ARTURO EN 1956
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La sotana la vistió por vez primera en el cine:
- Eran mis comienzos cuando decía dos o tres fases nada más. Me puse una sotana en una película que se llamaba, me parece Cuerda de presos - (1956) de Pedro Lazaga a partir de la novela (1953) de Tomás Salvador (Premio Nacional de literatura, 1954)(1)- , pero nunca había tenido la oportunidad de vestir la sotana. Es una forma muy distinta a ponerme un traje normal y corriente de tantas las comedias que he interpretado. Creo que esta es la mejor comedia que he interpretado y me siento cómodo.
Además de la sotana Arturo vistió habito en el personaje de Fray Pelayo, hermano gemelo de Luis, que también interpreta Arturo, en la serie televisiva Como el perro y el gato (TVE1 2007).
HOMOSEXUALIDAD, ORDENACIÓN DE LAS MUJERES
En clave de comedia el texto aborda temas candentes en la iglesia
- El texto cayó en mis manos hace bastante tiempo. Según el público es la mejor que he hecho arriba de un escenario. No me extraña, por lo inteligente que es, y sobre todo por el tema que tiene tan vigente de actualidad. Se tocan los temas planteados hoy: ordenación de las mujeres, homosexualidad y se tocan en profundidad, ¿Por qué no se pueden casar los sacerdotes? Las mujeres ¿por qué no pueden ser sacerdotes? Se tocan muy valientemente como lo hace el Papa Francisco. Aborda el tema de la soledad del sacerdote que es verdaderamente importante. Nunca nos damos cuenta de la soledad que tiene. Falto, digamos de la ternura de las familias, de las parejas que los demás tenemos. Eso queda plasmado en esta comedia con una sonrisa y digamos bastantes carcajadas y mucho sentimiento. Es una comedia en la que se aclaran muchísimas cosas. Gracias al Papa Francisco que muestra otra manera y casi todos los días puedes sacar un apartado en el periódico en que muestra su manera muy liberal de ver la Iglesia. Esta comedia tiene muchísimas cosas del Papa
UN SEMINARISTA PROBLEMÁTICO
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Quien plantea toda esta problemática es Tomás de la Casa, el seminarista, y se centra la discusión fundamentalmente en la vida de los sacerdotes y su ministerio.
- la cuestión del divorcio ni siquiera se menciona. Los puntos que más toca en esta función es la homosexualidad dentro del sacerdocio, y la posibilidad de que la mujer sea sacerdote. Se podría hablar de otros, pero el autor no los trata. Habla de esos dos problemas, y desde un punto de vista humano, moral. Por ejemplo si el Papa Francisco tuvo una novia antes de entrar en el seminario ¿cuál es el problema de si hubiera tenido un novio? Tan elemental como eso. Es muy elemental, no responde a un discurso filosófico. Es un planteamiento elemental. Tenemos el anglicanismo que desde hace 20 años la mujer puede ser sacerdote e incluso ahora obispos y en la Iglesia está en el aire.
HE PROCURADO QUE NO FUERA UN SACERDOTE ANTIGUO
Tanto Arturo como David han estudiado cómo encarnar su personaje
- He estudiado bastante la forma de mover las manos. Los sacerdotes las mueven de otra manera, la forma de expresión, de hablar... Son embajadores de Dios y eso requiere saber estar. He procurado que ese sacerdote no sea un tipo de sacerdote antiguo. Dado que el Papa Francisco, en cada comentario suyo, es algo muy alegre, muy cambiante... Siempre digo que la Iglesia ha ganado muchísimo con este actual Papa. Incluso al ateo le cae muy bien, porque es muy auténtico, muy realista, muy católico, sobre todo, pero con una amplitud de miras, siempre que se respeten las reglas.
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HE BUSCADO EL SEMINARISTA QUE PODÍA HABER EN MÍ
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He empezado por leer la Biblia, que no lo había hecho nunca. Saber lo que tienen que estudiar los seminaristas cuando están en el seminario, cuáles son sus etapas. Ha hablado con seminaristas. He intentado acercar mi corazón al de un creyente . Nunca me había acercado a un mundo religioso y entonces lo conocía de lejos. Arturo, sí, pues es un hombre muy religioso. Tenía que acercarme un poco a ese mundo, pero de una forma cómoda y sencilla. No he cogido a un seminarista y lo he estudiado. Más bien el seminarista que podía haber en mí si la vida me hubiera llevado por esos derroteros.
En lo que respecta al modo de comportamiento físico David lo define como
- una oposición al Padre José María, el cual es un hombre muy abierto, con gestos muy grandilocuentes. Por el contrario Tomas, yo, hace un mayor esfuerzo por ser más contenido: cierra las manos, está en posiciones más recogidas, al hablar intenta un tono menos grandilocuente. Son elementos de construcción física que al ser dos personas enfrentadas, tienen que mostrarse el enfrentamiento.
¿CON LA IGLESIA HEMOS TOPADO?
La comedia centrada en ese enfrentamiento dentro del mundo eclesial tocando temas en interrogante, en la actualidad, para la Iglesia, no es descartable que llegue un momento en que se haga realidad el dicho del Quijote:"Con la iglesia hemos topado, Sancho", en su segundo significado de enfrentamiento de Estado e Iglesia, ya que el original es más simple: "Con la Iglesia, edifico, hemos topado, Sancho". Arturo insiste en que
- Es una comedia muy inteligente sin ofender nada a la Iglesia. Mi gran preocupación era si había algo que no fuera auténtico, honesto, con respecto a la Iglesia. A lo largo de nuestra "tourné" por el Norte han venido muchísimos sacerdotes a ver la función y muchísimos seminaristas que nos han esperado a David, mi compañero, y a mí para felicitarnos. Mi pregunta era si había algo que pudiera perjudicar a la Iglesia, y me han dicho que no. En absoluto, todo lo contrario. Eso me da un gran descanso. España es católica a excepción de ciertas personas que no lo son, como es normal y lógico, pero dado la opinión de estos sacerdotes me han tranquilizado. Todas las cosas que se dicen las ven en la televisión, el periódico e incluso por el propio Papa Francisco que nos está enseñando a no tener miedo a decir las cosas siempre que se admitan ciertas reglas. No quiero hablar mucho de la comedia para no desvelarla, pero puedo decir que gracias al Papa Francisco creo que era oportuno interpretar esta función y ponerla al público, sobre todo con mucho respeto hacia la Iglesia, porque empiezo por decir que yo soy católico. Entonces tampoco lo iba a consentir.
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ARTURO FERNÁNDEZ
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TRABAJAR CON ARTURO: UN GRAN MOMENTO PARA MÍ
El enfrentamiento de los dos personajes, lleva a pensar en el en enfrentamiento de dos estilos de hacer teatro: el de Arturo y el de David, perteneciente a las nuevas generaciones de actores, más enraizados en nuevas técnicas y formas.
David Boceta lleva en esto del teatro desde 1999. Una buena parte de su trabajo se ha desarrollado en la Compañía de Teatro Clásico en títulos como El perro del hortelano en el papel de Teodoro (CLIKEAR), Las bizarrías de Belisa (2) (CLIKEAR) y otros. El que haya aterrizado en este montaje a dos se debe a que
- El año pasado hicimos una obra juntos que se llama Ensayando Don Juan (CLIKEAR), de Albert Boadella. Yo interpretaba al chico que hacía Don Juan. Allí nos conocimos. Creo que Arturo me ofrece este personaje, porque me vio en el Don Juan e hicimos una gira juntos y nos entendimos muy bien. Yo le respondía un poco al perfil que necesitaba para este personaje. Cuando me lo ofrece me siento encantado porque más allá de que para mí es una oportunidad trabajar a su lado, pues aprendo muchísimo, tanto profesional como personalmente, es un gran momento para mí. Yo a él lo admiro mucho, y en el escenario muy pocas veces he trabajado tan cómodamente como he trabajado con él. Pocas veces disfruto tanto de mi trabajo como en estas dos producciones últimas que he hecho junto a Arturo. Es algo que siempre decimos los actores que trabajar con otro es fácil, pero es muy difícil de encontrar. Con Arturo, yo encuentro que eso es real.
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(1) Cuerda de Presos, Productora: Ansara Films Intérpretes: Germán Cobos, Antonio Prieto, Fernando Sancho, Rafael López Somoza, Lis Rogi, Anibal Vela, Carmen Lozano, Antonio Almoros, Fernando M. Delgado, Arturo Fernández, Santiago Rivero, Laly del Amo Género: Drama Siglo XIX. Vida rural 1890. Un peligroso criminal ha sido capturado. Una pareja de la Guardia Civil ha de trasladar el pueblo leonés hasta Vitoria, para ser juzgado. El camino es unn terreno abrupto y hay que hacerlo a pie.
(2) A David Boceta, andaluz de origen, le endilgan, casi, la responsabilidad de ser el portavoz de los actores. Sus credenciales además de ser andaluz es ser el Conde Enrique, que siempre va con un gramófono de discos de pizarra y canta, matiza que ese amor es…
muy libre, la pasión hasta sus últimas consecuencias al no haber personas mayores que los repriman. Todos están enamorados que quien no deben y ahí es donde está el conflicto. Mi Conde Enrique compone canciones y bailes, pero Belisa no le corresponde. (Las bizarrías de Belisa, www.madridtettro.net)
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