Natalia Dicenta Herrera. De casta le viene al galgo. Imprimir
Escrito por José R. Díaz Sande.   
Miércoles, 17 de Marzo de 2010 13:03

 

 

 


NATALIA DICENTA HERRERA
DE CASTA LE VIENE ALGALGO

[2006-03-16]

Antonio Buero Vallejo estrenaba Diálogo secreto. Al poco tiempo moría Ismael Merlo que interpretaba uno de los personajes. Natalia Dicenta era la chica joven.



RESEÑA, 1984
NUM. 153, pp. 21 - 23

NATALIA DICENTA HERRERA
DE CASTA LE VIENE EL GALGO

Antonio Buero Vallejo estrenaba Diálogo secreto. Al poco tiempo moría Ismael Merlo que interpretaba uno de los personajes. Natalia Dicenta era la chica joven. Estaba iniciando su carrera de actriz. En la entrevista revelaba su facilidad para el canto. Tal cualidad desembocó en audiciones de corte jazzístico.

Uno va y olvida a la señorita Pérez Mínguez a quien probablemente - como promoción - unas líneas pueden quizá servirle para algo. La olvida y se fija en Natalia Dicenta que por lo de Dicenta y por lo de Herrera tiene todas las facilidades del mundo y todas las puertas abiertas.

- Pues ¿sabes que te confundí con Natalia Figueroa?

  • Pues fue mi madrina.

¡Vaya, hombre! Si es que voy para "brujo". Eso de la "madrina" me lo aclaraba en el café antes de la cita de las seis y cuarto de la tarde que ya eran las seis y media. En el café, ojos de recién levantada y el sosegamiento de un cierto mal cacao previo. Por eso a mi original petición" ¿Te saco una fotografía delante del cartel?" "¿Con esta facha?" "Bueno, pues lo dejamos". "Oye, ¿se puede tomar algo antes de la entrevista." "Pues, se puede."
 

  • Vengo de un mal humor. La siesta me da mal humor. Y luego el taxista. De esos enteraos y pesaos. "Que si el agua es muy necesaria."

En el café el camarero familiar: "Hola, pequeña, ¿qué tomas?" La siesta es siempre mal humor en Natalia, por eso "no me gusta dormirla". A hurtadillas y en silencio uno hace comparaciones odiosas: "se parece a su madre una barbaridad, cuando saca la dulzura y la fiereza. Y también la voz."


NATALIA DICENTA (1984)
FOTO: J.R. DÍAZ SANDE

  • Hoy he dormido porque en estos días llevamos un tute de ensayos.

Ismael Merlo se fue casi sin avisar. El "shok" de su inesperada muerte, la obligada sustitución por parte de Pablo Sanz y los apretados ensayos de reemplazo.

  • "Impresiona, impresiona la muerte de un compañero y, aún ausente, a veces me parece que va a salir entre bastidores o dar la réplica con su característica voz."

"TENÍA SUPERCLARO QUE IBA A DEDICARME A ESTO"

La tónica sonríe en sus ojos y olvida el antiguo mal cacao de siesta y taxi. El "camerino", cuchitril de éxitos y pesares de actor, adecentado con fotos queridas en las paredes y alguna muñeca en el pseudo-diván.

  • -Correcto: Natalia Dicenta Herrera. Nazco en Madrid, en el barrio Chamberí el día 6 de julio del 62. (Sólo falta la foto de frente y perfil con número de varias cifras en el borde inferior).

Uno ha visto Función de Noche y sabe que "vivo en casa con mi madre" y lleva una vida "normalísima". Imagina un pasado de EGB y compañía y "estudio hasta el COU y lo aprobé y saqué la selectividad y todas esas cosas".

- Sí, esas cosas.

  • Lo que pasa es que luego no seguí. O sea yo iba a entrar en la Academia de Arte Dramático, en la Escuela de aquí, en el Conservatorio pero me ... bueno hicieron que me rajara. Me contaron tantas cosas, tan horribles... Creo que antes era una maravilla pero cuando yo la pillé estaba muy mal. Hace unos cuatro o cinco años. Y cada vez que me encuentro con gente, cada vez me cuentan más historias alucinantes.

- ¿No te tentó otra carrera?

  • No, lo tenía muy claro.

- Sería por lo de los "genes".

  • Lo tenía muy claro.

- Pero te ayudó el entorno familiar.

  • No, a mí, influenciar, no me ha influenciado nadie.

Uno es escéptico en lo de las "libertades de elección”. Los años.

  • ¡Hombre! eso quieras que no. Siempre metida en esa historia, pero la decisión fue mía.

"Esa historia" comienza a los doce años. Tres cosas para TVE y entre ellas: Seis personajes en busca de autor y Verano y humo. Después, el teléfono pedía contratos pero doña Lola Herrera "fue lista y decidió que no. Que la niña va a seguir estudiando su colegio y que cuando acabara, entonces sí. Y a los 17, todavía en COU, me ofreció Manolo Ripoll, en televisión, un Estudio 1: Ocho mujeres y yo ya tenía mi cabecita y eso. Bueno, me quedó claro. Lo tenía superclaro que yo quería dedicarme a esto".

- Esa decisión ¿la tomas por alguna motivación más concreta o bien te tira la fama o como en la vida hay que hacer algo antes de morirse...?

A cada respuesta aparta el espejito y enristra el lápiz negro. "No, no. Tengo claro que amo esta profesión y que quería ser actriz. Quería estar en un escenario (Natalia siempre dice en un escenario y no sobre un escenario). “Para mí el REY es el ESCENARIO y lo tenía muy claro. Lo comprobé y me quedó superclaro el año pasado cuando hice unos 'bolos' con Antígona, de teatro clásico. Pero teatro clásico de verdad. Es decir: Mérida, Itálica, Sagunto. Un “debut” fuerte. Sobre piedras, teniendo que proyectar la voz con mogollón de espectadores en aquellas gradas. Me quedó muy claro que no me quería mover de un escenario para nada. Era una sensación demasiado fuerte de querer seguir y a la vez querer quedar y amar aquello. Querer a la gente que te está escuchando y a la vez tenerla miedo. Una serie de sensaciones fuertes que yo no quería abandonar. Por nada. Es una especie de droga muy fuerte. Es algo muy hermoso estar en un escenario."

LA SEÑORITA PÉREZ MÍNGUEZ

- Es muy hermoso porque tienes 22 años y has tenido mucha suerte, Si tuvieras que arrastrarte tras papeles modestos...

  • De lo que me hablas es algo que nunca se me va de la cabeza. Desde luego, por llevar unos apellidos: los Dicenta, gente de teatro de muchas generaciones y Lola Herrera que ella sola surgió pero que está ahí... Entonces por Daniel Dicenta y Lola Herrera, está muy claro que yo he tenido unas facilidades maravillosas y nada más nacer me he visto metida dentro de la profesión. Y cuando decidí quedarme en ella tuve todas las facilidades del mundo y todas las puertas abiertas. Luego viene lo difícil: demostrar que tú, de verdad, viniendo de esos "genes", de esas familias y esas historias, vales para eso. Lo que sí está muy claro es que la gente que va a la escuela y se apellidan Rodríguez Mínguez tienen que luchar fuerte por conseguir un papelito de doncellita. Esto lo sé y es algo que, a veces, me da casi cargo de conciencia. Pero a la vez me digo, "bueno, y yo qué culpa tengo de llevar el Dicenta y el Herrera encima. En todo caso me siento orgullosa de llevarlo. Porque sé quiénes son". Lo que creo es injusto y me parece muy mal es que por esos apellidos me dan ese margen de confianza y a la señorita Pérez Mínguez, no se lo dan. Y a lo mejor es una actriz maravillosa, sólo que se llama Pérez Mínguez.

- Pero a la Pérez Mínguez no la comparan ya ti sí.

  • Y lo he vivido. Yo acabo de empezar. Es normal que descubran en mí gestos, matizaciones de ellos dos. A la hora de interpretar eso sale. Pero estoy creciendo como actriz y como persona. Entonces, poco a poco, también me iré definiendo y seré de ellos dos pero saldrá una persona por su propio caminito. Cuando era muy jovencilla me cabreaba mucho que me dijesen eso de "tú nunca llegarás a ser como mamá". "Pues yo no seré eso, porque seré diferente!" Ahora ya no me cabreo. Está claro que las comparaciones existen, que la gente por ello se hace odiosa y que las tienen que hacer por narices porque hay un morbo especial. Entonces paso por encima de eso y digo "shhhh", "¡por supuesto!" Y lo cuento sin cabrearme: "No seré ni como uno ni como la otra. Yo tiraré por mi camino. Me iré definiendo. Tendré cosas de uno y de otra porque son caracteres muy fuertes, pero me iré definiendo."

EL ¡PUM! ¡PUM! DE ESPONTANEIDAD

- Regalo de los dioses es ese saber estar sobre el escenario y dar un sano naturalismo a tus interpretaciones con gran espontaneidad. ¿Posees alguna escuela o técnica?

  • No. No he estudiado en ninguna Escuela aunque tengo ganas de ir. Pero una Escuela en la que estudies canto, pintura, historia, interpretación y muchas cosas más. Cosa que no hay aquí según me han dicho. De momento mi única escuela es el haber visto trabajar a mis padres y la que vas adquiriendo al subir a un escenario o lo que lees, porque no paro de leer.

- Eres de las de "meritoriaje" y aprendizaje sobre el escenario.

  • Sí, lo que pasa es que no he tenido que pasar por los papelitos pequeños. Y estoy aprendiendo en el escenario, lo cual no quita que valore mucho las Escuelas. Que tienen que estar aliado. Me parece muy bien que lleves todo dentro, pero una técnica y toda una historia te ayudan a canalizar y modelas mejor esas cualidades.

- Tu personaje se acomoda bien a tu persona y entra en una clave más naturalista. Eso se te da bien, pero ¿serías capaz de otro tipo de interpretación más farsesca, esperpéntica...?

  • No lo sé, porque aún no lo he probado. Lo que ocurre es que por estar empezando y estar prácticamente virgen no tengo ningún tipo de... ivamos!, no estoy maleada. No tengo "tics" y todo me sale espontáneo. Sale ipum! ¡pum! como lo siento y si tengo cinco sentidos, doy siete. Pongo todo mi corazón. Es esa gran sinceridad lo que me sale fuera. Pero, efectivamente, lo que tú dices: hay otros tipos de interpretación. Eso aún no lo he probado. Sí te puedo decir que, dentro de esa espontaneidad, he notado diferencia. El año pasado cuando interpretaba Ismena en Antígona, al ser un drama clásico, era muy diferente. Mira, lo que yo sé es poner todo mi corazón y dar una gran dosis de sinceridad. Pero aún necesito probarme y esa pregunta te la contestaría más tarde.

- ¿Te sirve la labor del director?

  • Necesito hablar con él. No me basta aprender el texto y el "ahora te levantas, ahora sales... ". Necesito que me guíen y que haya auténtica confianza. Auténtica comunicación. Tenemos que hablar, desgranar el personaje e intercambiar visiones. Discutir, tomarme unas cañas con él. Pero eso de "muy bien pequeña, muy bien...", no me sirve de nada. Todo lo contrario. Me puedo coger un cabreo y una dosis de inseguridad importantísima.

- Y ¿te hacen caso a todo eso?

  • ¿Cómo que si me hacen caso?

- Pues eso, entre que eres joven y no la protagonista...

  • Sí, sí me han dirigido. Bueno, a lo mejor, todo lo que he dicho es una utopía, pero en conjunto sí que me han guiao. Si no me decían, yo preguntaba. Al menos por preguntar no ha quedao y me lo han aclarao. Y, sí, que me han echao una mano.

BUERO ES UN MAL ACTOR

- ¿Ha intervenido Buero en los ensayos?

  • Sí y me hacía gracia ver cómo subía al escenario e interpretaba el personaje. Aparte de explicarte y desgranarte el texto, que es una auténtica maravilla, el cómo te lo contaba tan claro te resultaba más fácil. Ver cómo el interpretaba..., bueno Buero es mal actor aunque sea un magnífico escritor, pero su opinión y su manera de hacer te guiaba. Además, después, respetaba mucho el hacer de los demás.

DIÁLOGO SECRETO (A. BUERO V.)
NATALIA DICENTA/ MANUEL TEJADA
ISMAEL MERLO/CARLOS LEMOS
FOTO: JESÚS ALCÁNTARA
Teatro Infanta Isabel 1984
- ¿Qué le ha parecido el montaje?
  • En general, creo que está satisfecho. Lola Cardona es una mujer con la que ya ha trabajado cuatro veces. Carlos Lemos, sin ningún problema. Ismael no te quiero contar y Manolo Tejada es la primera vez que trabaja con él, pero sin problemas. Y conmigo, pues también me ayudaba, me explicaba cositas. Está de acuerdo y contento.

- ¿Cuál es tu proceso de composición del personaje?

  • Creo que todavía no lo he encontrado. Comienzo por aprenderme el texto hasta reasimilarlo y olvidarlo. Me llevó unos tres días. No puedo ensayar con el libreto en la mano. A partir de ahí intento buscar el sentido de lo que estás diciendo. A darle vida y meterlo dentro de ti. A eso te ayuda el director, tus compañeros... Al ensayar e intercambiar con ellos el texto, encuentras cosas. Hay días que no encuentras nada y parece que no han servido para nada. Y hay días que ¡pum!, mágicamente salen cosas, pero no sé explicarte concretamente el orden. Al final sale. Lo que sí me dicen, los que poseen la técnica de creación de un personaje, es que "el personaje se te cree y sincero pero no lo has compuesto. Te ha salido porque eres así. Deberías aprender, porque si de normal, sin saber nada, te sale así, si estudiases y aprendieras sería la repera".

- Con cuál te encuentras mejor ¿en el papel del pasado, la niña, o en el papel del presente, la estudiante de periodismo?

  • La niña me resulta más fácil porque yo siempre he sido una gamberra. Ha sido como un juego, sin menospreciar ese personaje. Ha salido esa niña repipi. El personaje de más mayor me ha sido más difícil porque es un auténtico monstruo. Cuando lo leí quedé aterrorizada porque era de una dureza espantosa. No dejaba títere con cabeza. A mí me preocupaba darle humanidad dentro de esa dureza. Me ha costado mucho y me sigue costando.

NATALIA ES MADRID

Lola Herrera, su madre, es toda Valladolid. "Yo de Valladolid tengo muy buenos recuerdos de pequeña. Nací y a los 17 días mi madre salía de gira y me quedé con mis abuelos y me he criado con ellos. Recuerdo el lugar en la calle, tiramos piedras, el cocido de mi abuela, el ir a buscar a mi abuelo, con su comida, a las tres a la RENFE... de muchas cosas muy ricas. Mucha vida de pequeña."

- Y ¿ahora?

  • Me desligué. Mi vida fue Madrid: mi colegio, mis amigos. A Valladolid vamos de vez en cuando porque tengo familia, pero prefiero estar en Madrid. Es que no me gusta Valladolid, como ciudad.

Un día normal es "la clase de canto" ("Sí, tengo voz”), la clase de baile ("de pequeña bailé clásico y ahora moderno"), dobla películas ("interpreto personajes jóvenes a pesar de tener una voz profunda, pero dicen que queda bien por la espontaneidad de la juventud") y se levanta temprano ("a las once") a pesar de las dos funciones, come a las cuatro y a las seis comienza a maquillarse.

  • iFaltan diez minutos! Es que si hablo no sé maquillarme al mismo tiempo.

- ¿Te pones de perfil para una foto?

  • ¿De perfil? Tengo una nariz... bueno no sé exactamente cómo la tengo ni si bien o si mal...

- Bueno, pues de medio perfil…


José Ramón Díaz Sande
Copyright©diazsande

 

Última actualización el Sábado, 24 de Abril de 2010 18:12