La Tempestad. H. Pimenta. Entrevista Imprimir
Escrito por José R. Díaz Sande   
Martes, 16 de Marzo de 2010 07:53

 

LA TEMPESTAD de WILLIAM SHAKESPEARE
en el TEATRO ALBÉNIZ
de la mano HELENA PIMENTA

[2005-03-14]

MINIMALISMO EN LA ESCENOGRAFÍA Y
TRABAJO ACTORAL PREFERENTEMENTE.


LA TEMPESTAD
de
WILLIAM SHAKESPEARE

en el

TEATRO ALBÉNIZ

de la mano

HELENA PIMENTA


EL DESPERTAR

MINIMALISMO EN LA ESCENOGRAFÍA Y
TRABAJO ACTORAL PREFERENTEMENTE

“NUNCA HE HECHO A SHAKESPEARE”,
EL
LEIV MOTIV DE LOS ACTORES.
 

  • Es nuestro primer Shakespeare. Ante Shakespeare uno se pone riguroso y serio. Miras todo lo que se ha representado y escrito sobre él y sobre el tema de La Tempestad y ves que todos afirman cosas distintas. – es Ramón Barea (Próspero) quien así se expresa – Tal diversidad te tranquiliza, pues intuyes que no está todo dicho. Y esta es la gran virtud de los clásicos: el que en cada época se puede trabajar el subtexto. Los clásicos crean personajes de rango universal.

RAMÓN BAREA es PRÓSPERO

Este no haber hecho nunca a Sakespeare es el denominador común de este elenco al frente de Helena Pimienta.
 


ALEX ANGULO es ESTEBAN el borracho.
  • Yo soy un tercio de los cómicos. También es mi primer Shakespeare y el autor me ha obligado a darme a la bebida. – es Alex Angulo quien habla - Estaba asustados por dos razones: una Shakespeare y la otra el haber estado 8 años sin hacer teatro. Tenía miedo de haberme olvidado. He visto que no tengo miedo sino mucho morro por meterme con un Shakespeare y dejarme dirigir por una señora.

Alex forma parte del trío cómico, personajes obligados en las tragedias shakesperianas. Vicente Díaz es otro de los tercios payasescos y, mire por donde, también es su primer Shakespeare.
 

  • Así de entrada me asusto. Pero después ves que los grandes autores te ponen fácil la cosa. Lo bonito de las comedias clásicas es que muestran muy evidente su vigencia. La gente se ríe y se agradece esa respuesta inmediata. Pero lo que más emociona es pensar que la gente del 1611 y la de hoy se rían con los mismos chistes. Conmueve ese gran amor que Shakespeare muestra por el mundo de los clowns y es que al ser él mismo un actor, lo que en realidad hace es mostrar su propio mundo y el de la comedia.

VICENTE DÍAZ es TRÍNCULO

Con respecto a esto de la risa Alex, que personifica a Esteban, el borracho piensa que

  • “No tenemos gracia pero en esta obra parece que sí y yo me estoy divirtiendo con la obra y no me creo que haya sido escrita en 1600, pues me siento muy aludido.


LOS CÓMICOS

Un tercero que tampoco ha interpretado a Shakespeare es Mikel Losada, “también de Bilbao como yo” - especifica Alex Angulo, haciendo patria.

EL DESCONOCIMIENTO DE SHAKESPEARE
LO SUPLE HELENA PIMENTA


La tal falta de experiencia sobre las tablas con Shakespeare, puede ser un handicapp o una ventaja, al venir sin clichés de cómo es un Shakespeare y una Tempestad. Todos, al menos los que allí estaban, confían en Helena Pimenta, la directora, cuya virtud en palabras de Ramón Barea consiste en:

  • “No mirar al texto sino la parte carnal que tiene de teatro. Y este tratamiento es muy lógico para con Shakespeare, ya que era un actor y un contemporáneo a su época. Helena no estuvo con Shakespeare, pero sí con la escena y con lo que hay que comunicar. Cuando la ves dirigir parece que estuvo con el mismo Shakespeare”.

Este concepto “carnal” Ramón lo ejemplifica a través de su propio personaje:

  • “Yo soy el Duque de Milán y me ha pedido que me he olvidara del ducado. Eso está muy lejos para el espectador. Lo importante no es ser el duque sino el padre que tiene una hija. Esta consideración hace que Helena trabaje a favor de los actores. Va hacia los sentimientos y no te permite declamar nada. Esta es una de sus virtudes”.

HELENA PIMENTA

Una de las características de dirección de Helena Pimenta es mirar con ojos distintos a los clásicos de toda la vida. Fue la revelación con El Sueño de una noche de verano y mantuvo esa filosofía con los textos que fue abordando.

En La Tempestad, obra escrita en las postrimerías de la obra literaria de Shakespeare, mantiene la misma filosofía insistiendo en la vertiente más humana.
Es obra de no fácil lectura, en cuanto que confluyen diversas historias, aunque la de Próspero, el duque Milán, es la central.
 

  • Tiene fama de ser difícil y hermética en cuanto a la interpretación. Por ello ha y que elegir un camino. Por otro lado la trama parece débil con una serie de conflictos menores. Los grandes directores siempre la han retomado en carias ocasiones como buscando más cosas. Por otro lado requiere un amplio elenco, como todo Shakespeare. A todo esto se añade un trabajo interpretativo nada fácil. Por ejemplo Próspero no tiene la empatía de Hamlet. La mayoría de las versiones se han orientado por la línea de la magia, huyendo de la propia historia. Yo como pienso que siempre hay que probar asumo el riesgo de buscar otra línea. Pongo especial atención a cuatro tramas, que creó tuvo en cuenta Shakespeare: la épica, la mágica, la trágica y la lúdica.

EL ENSAYO

El hecho parte de un acontecimiento que sucedió realmente: el ambiente de conquista y colonización tardía hacia América que latía en la Inglaterra de 1611.

  • "Shakespeare tomó un caso de la vida real para plantear cuestiones como el bien y el mal, la colonización de América y el deseo de rectificar errores cometidos en el orden social con la esperanza de inventar en una nueva tierra algo que salvara esa contradicción constante".

EVITAR EL ABSTRACTISMO

La Tempestad es obra que se recuerda con dificultad en cuanto a la trama, no así con Hamlet, Macbeth o cualquier otra obra shakesperiana.
 


LOS ENAMORADOS
  • “En sí misma, la historia es sencilla y como ya he dicho tiene mucho de relato contemporáneo – había ocurrido hacía 12 años - a la época de Shakespeare. Por lo tanto hay una identificación entre le tiempo real y el tiempo de la ficción. Aunque hay muchas tramas y una central, la historia de venganza, en realidad la trama no es muy importante, pero sí debe ser contada. Este cruzar de historias es necesario porque es como si se completaran y al mismo tiempo se completan unos personajes con otros. Entre todos se completa la historia de la humanidad”.

Ello lleva a un cierto “abstractismo”, que posiblemente es el lastre que tiene el texto y de ahí que en el recuerdo siempre La Tempestad aparezca como confusa. A este respecto Helena tiene las ideas claras.

  • “Hemos intentado evitar de hablar de cosas abstractas y hemos buscado una historia hilvanada. Pero tampoco se pretendía centrarse en una historia como tal, porque entonces hubiéramos hecho una historia de aventuras muy propia de la época. Esa proliferación de historias que se complementan vienen a ser como un espejo múltiple de la humanidad”.

Helena define el tratamiento de “minimalista”, lo cual para ella es “fascinante”.

De tal minimalismo se contagia la escenografía que en palabras del escenógrafo – interpreta también el papel de Antonio - José Tomé:

  • “Se ha pretendido quitar lo mágico para adentrarnos en una historia pequeña que tiene que ver con la vida de Shakespeare. Por ello se ha pretendido que el paisaje no distraiga. De ahí que el nuestro sea un espacio neutro y el atrezzo sea mínimo, con el fin de conseguir qure a través de la nada, aparezca el lenguaje del teatro más que otra cosa”.

Así pues la escenografía y la iluminación están al servicio del actor que es el que se mantiene en primer término. Ello ha exigido un trabajo del actor muy cuidado.

Aunque todas las historias son necesarias, la de Próspero marca la línea central. Ramón Barea - el Próspero de esta versión – expresa su relación con el personaje como una incógnita:
 


R. BAREA y CONCHA MILLA (MIRANDA)
  • “Al principio no entiendes nada. Te pierdes en el texto. Sin embargo cuando te olvidas de la parte política y social, te olvidas del Duque y te centras en su paternidad, ves cómo este hombre obliga a sumisiones a Calibán, a su propia hija Miranda, a Ariel… Ves las calidades humanas en lo bueno y en lo malo. Al quitarle el concepto de mago que tiene y buscarle el lado de la venganza y su parte humana, el personaje aparece como menos cartón piedra. En realidad lo que hemos hecho es quitarle el disfraz. Ese ha sido nuestro recorrido. En el mundo hay infinidad de Prósperos. Nuestro Próspero es ha sido despojado de todos los perifollos que ocultaban su identidad humana.


LA TEMPESTAD

Título: La tempestad.
Autor: William Shakespeare.
Versión y dirección: Helena Pimenta.
Escenografía y vestuario: José Tomé.
Iluminación: Miguel Ángel Camacho.
Espacio sonoro: Eduardo Vasco.
Intérpretes:
Ramón Barea (Próspero), Álex Angulo (Esteban, contramaestre),
Jorge Basanta (Ariel), Vicente Díez (Trínculo), Jesús Berenguer (Gonzalo),
Jacobo Dicenta (Sebastián), Pietro Olivera (Calibán), Concha Milla (Miranda),
José Tomé (Antonio),Jorge Basanta, Mikel Losada y Fernando Ustarroz.

Compañía: Ur.

 

Más información

           LA TEMPESTAD - Información General

           LA TEMPESTAD - Crítica Teatro
           LAS AMBICIONES DEFRAUDADAS - LA TEMPESTAD - Crítica Teatro
           TEMPESTAD Y POSTERIOR NAUFRAGIO - Crítica Teatro
 


José Ramón Díaz Sande
Copyright©diazsande


TEATRO ALBÉNIZ
Teatro de la Comunidad de Madrid
Dirección: Cristina Santolaria
C/ de la Paz, 11
28012 - Madrid
Tf. 91 531 83 11
Metro: Sol
Autobuses: 3,515,50,51,52,53,150
www.teatroentradas.com

 

Última actualización el Martes, 16 de Marzo de 2010 08:22