¡Chimp'n! Panfleto post mortem. Entrevista Imprimir
Escrito por José R. Díaz Sande   
Martes, 13 de Enero de 2015 21:09

 ¡CHIMP'N! PANFLETO POST MORTEM
LA VIDA: UN RATITO QUE ESTAMOS AQUÍ

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FOTO: VIDEO PROMOCIÓN CDN 

No deja de ser original eso de ¡Chimp'n!, término que da punto final a una partitura musical o cualquier acontecimiento. Según Petra Martínez, intérprete de este espectáculo no es el caso.

  • ¡Chimp'n! se refiere a un chiste de la calle, que hacemos en la obra, de un niño que canta mucho. Cuando va al colegio va cantando La Traviata continuamente. Le pilla un coche y se cae. Su amigos le dicen "Manolito dinos algo". Manolito inclina la cabeza y dice ¡Chimpón!". Se muere.

  • También hay otra cosa - añade Juan Margallo, el otro intérprete-, yo de música sé muy poco, y aquí para terminar esto: "¡Chimp'n!", como para rematar la cosa. Es el final de la vida, como en el chiste. Al que le gusta la música es el final de la música, todos tenemos un "¡Chimp'n!".

LA VIDA UN SUSPIRO

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   OLGA MARGALLO
FOTO: www.madridteatro.net

Olga Margallo se ha encargado de la dirección y su visión de la obra se ilumina con una advertencia de su hijo.

Ya habíamos empezado los ensayos de esta obra cuando mi hijo de ocho años me dijo una tarde:"¿Cuánto rato vamos a estar aquí?" Si hubiéramos estado en una parada de autobús o esperando para entrar al médico, hubiera sido una pregunta normal, pero estábamos en casa, tumbados en el sofá.

No te entiendo - le dije yo - ¿Estar dónde?

En la vida - me dijo él.

De eso trata nuestra obra. De la facilidad que tenemos para olvidarnos a veces, que estamos de paso, que luego vienen otros y que la vida es un suspiro, una pesadilla, un buen "rato", un horror, una maravilla.

Este es el resumen que Olga Margallo, la directora de este espectáculo, hace de ¡Chimp'n panfleto post mortem, un texto de Petra Martínez y Juan Margallo, que llega a la Sala Francisco Nieva del Teatro Valle Inclán (Centro Dramático Nacional). Se trata de una Coproducción del CDN con Uroc Teatro - compañía fundada por Petra Martínez y Juan Margallo en 1985, y que en la actualidad dirigen Olga Margallo - su hija - y su marido Antonio Muñoz De Mesa -, cuya andadura comenzó hace dos años.

EL ORIGEN DE LA OBRA,
CUATRO ELEMENTOS

Todo empezó, según Petra Martínez, con un interés por parte de Juan Margallo,

  • en sacar una silla de ruedas, en sacar robot, helicópteros y cantar la canción. Esto era fundamental. La obra empezó con esas cuatro cosas concretas y eso tenía que salir por narices. Luego hemos tenido la suerte de que todo eso ha ido engranándose y justificándose muy bien. Creo que como él piensa que va a hacer muy pocas obras más se dijo:"esto que quiero, lo meto por narices. son cuatro o cinco cosas que están muy bien en el teatro, pues son muy teatrales.

  • Eso fue lo único que le conté a Ernesto Caballero- director artístico del CDN - y le pareció muy bien. Me dijo:"Escribe la obra" - desvela Juan Margallo.

¿LA MUERTE O LA DESAPARICIÓN?

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JUAN MARGALLO
FOTO: www.madridteatro.net
 

El tema de la obra, Juan Margallo, lo plantea como un interrogante:

  • ¿La muerte o la desaparición?
  • Es la vida - interrumpe Olga
  • Bueno, también, porque la muerte no se entiende sin la vida. Es un tema recurrente en nosotros. La última obra que hicimos Cosas nuestras, de nosotros mismos, éramos dos cómicos viejos que fracasábamos en España y queríamos ir a América. Como yo conozco mucha gente en Latinoamérica, llamábamos a los diversos contactos en América y se habían muerto. El público se creía que eran bromas, pero no era así. Se había muerto casi todo el mundo de nuestra edad. Sólo quedan algunos. Tratamos el tema de la vida y la muerte con sentido del humor, que es la única forma de cómo hay que tratarlo. Como en la otra obra habrá gente que creerán que son bromas lo que hacemos. Salvo alguna licencia, la mayoría de las cosas son reales: anécdotas de nuestros padres durante la guerra civil. Resulta que el padre de Petra era de los republicanos y mi padre era de los de Franco. La historia de cada uno es que al padre de Petra lo salvó de la condena a muerte la mujer de un coronel, y a mi padre lo salvó un mexicano de las Brigadas Internacionales, que lo iban a fusilar en el Cerro de los Ángeles.

ESTAMOS EN LA VIDA TAN DE CASUALIDAD

Todo gira alrededor de esto, resume Juan, que define como

  • casual. Estamos en la vida tan de casualidad...Si a mi padre lo hubieran fusilado, pues yo no estaría aquí.  El otro día hablé con uno, mexicano, que hace un estudio sobre las Brigadas Internacionales, y me dijo: "A lo mejor es fácil encontrar a aquel mexicano que dijo:"dejarlo, a lo mejor le gusta tener un chaval cuando todo esto haya terminado".  No habría nada más en mi vida que encontrarlo, pero ya habrá muerto. "No había tantos mexicanos, sería posible...", me dijo. De todos modos lo que tratamos es la actitud en el momento de morir, por eso se llama panfleto post mortem. En el momento que pasa la vida delante de ti, que dices:"¿Qué ocurre en ese momento? ¿Te arrepientes? ¿No te arrepientes de las cosas?" Es una reflexión que nos gustaría que le ayudase a la gente a vivir bien. Que el final que tenemos todos es el mismo, y que hagamos por no amargar la vida a la gente y tratar de vivir lo mejor posible, que es lo que hemos hecho Petra y Yo, y Olga siguiendo mi camino.

LA VIDA ES UN SUSPIRO CORTITO

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  JUAN MARGALLO / PETRA MARTÍNEZ
FOTO: marcosGpunto

Para Olga la obra habla de

  • la vida y del ratito que estamos aquí todos. Es alucinante pensar que dentro de dos generaciones, nadie se acuerde de ninguno de los que estamos aquí, porque se dejará de hablar. Se dice que nos morimos cuando la agente deja de hablar de nosotros. Tiene mucho de ellos, aunque muy caricaturizadas, pero la  esencia de ellos está. El nombre de Tita es por Petrita y JF, por Juan Francisco que es Juan. También mucho de Tip y Col, de absurdo total. Es un despropósito. Mucho sentido del humor y con bastante más parte emocionante que la última obra, que era más "cachonda". El público se ríe pero se queda con esa parte emocional y comienzan a hablar de su vida. Todos nos acordamos mucho de que estamos aquí un ratito, y que la vida es un suspiro muy cortito. Tiene lo mismo de la obra anterior: no hay quien acabe con ellos, porque, incluso,  cuando hay fracasos se lo pasan bomba. Cuando se va a morir se lo pasan bomba. Hay algo de que hay que disfrutar.

  • También partimos de una actitud distinta - abunda Juan. Yo le he tenido, siempre, miedo a la muerte. A lo largo de la vida te vas acostumbrando, pero sí le tengo una aprensión fuerte. Pienso no voy a volver a ver a los seres queridos y otra imagen es: nunca más estaré en una playa tendido boca arriba, puesto al sol. Petra, en cambio dice que le da igual.

  • No me da igual - corrige Petra -, la muerte, en sí, no me da miedo, porque no la concibo. Lo que me da miedo es la antesala. Eso sí. Pensar en las enfermedades, me pongo mal, pero, en sí, la muerte, como después se acabó todo, que más me da. Cuando conocí a Juan, él se dormía todas las noches, dispuesto para ir a la tumba y boca arriba, cruzaba las manos sobre su pecho. Era una obsesión con la muerte, ahora ya no.

ESTA OBRA HA SIDO UNA LABOR DE JUAN

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PETRA MARTÍNEZ
FOTO: www.madridteatro.net
 

En otras obras la participación de Petra ha sido casi un 50%.

  • En esta ha sido labor de Juan - confiesa Petra. Yo estaba trabajando en otras cosas, y tenía poco tiempo. Generosamente ha puesto los dos nombres. Esta obra es algo que tenía enquistado, porque yo, nunca, hubiera escrito sobre la muerte. No tengo miedo a la muerte, y para qué hablar de ella. Ahora que ya está escrita, me gusta mucho, porque no habla de la muerte. Al contrario, habla de la vida, a lo mejor pasada, pero de la vida. Es una obra vital, y con la dirección de Olga. La obra está dentro de un absurdo: pasan escenas y una no tiene nada que ver con la otra. Olga lo que ha hecho es unirlo, y cuando ahora la veo me digo:"¡Qué barbaridad!", porque me pensaba que era muy difícil hacer eso.

TROZOS QUE UNO RECUERDA DE SU VIDA

La dificultad es porque el punto de partida eran "sketches" que Olga califica de

  • trozos de la vida. Me gusta, porque son como trozos que uno recuerda de su vida. La vida de cada uno son, en el fondo, "sketches": tu primera comunión quien la haya hecho, tu primer novio... Esta muy bien en el espectáculo el haber conseguido unirlos. Hay que decir que Juan quería sacar una guitarra con una canción y la ha sacado.

CANTABA EN LONDRES

La razón de ser de tal canción y guitarreo viene motivada porque

  • lo decimos en la obra, en el año de 1965, estuve viviendo de la canción en Londres. No se puede creer, porque canto fatal. Cantaba en un restaurante italiano llamado La Grotta, un restaurante chiquitito en el Estes Square. Cómo sería el gallego que cantaba antes que yo, pues le echaron y entré yo, pero yo es terrorífico como canto. Me sé 5 canciones latinoamericanas: La flor de la canela, Alas, corazón y vida, Vámonos para Acapulco, La preguntita de Athaulpa Yupanki y una más.  Es un momento de mi vida en la obra.

UNA SILLA EN EL FESTIVAL DE CÁDIZ.
LA VIDA TE PEGA UN COLETAZO
Y TE LLEVA PARA ALLÁ

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  PETRA MARTÍNEZ / JUAN MARGALLO
FOTO: marcosGpunto

Las sillas con ruedas tienen su razón de ser

  • La silla se la vi en el Festival de Cádiz, del que fui director durante 7 años, a un grupo de teatro llamado Farolito, que se alojaba en el hotel.  De pronto veo una silla que se movía sola por el hotel. Estaba acojonado, ¿cómo era eso?. Era con un mando a distancia en el bolsillo que la movía. El juego que nos da en la obra es como si estuviéramos empujados. Yo siempre pienso que cuando decimos "somos los que queremos", hay una parte que decidimos, pero hay otra parte que te lleva. La vida te pega un coletazo y te lleva para allá. Cuando estaba en Londres fuimos al puerto a coger un barco argentino, con otros tres españoles. ¿Dónde estaría yo si hubiera cogido ese barco? Es todo tan casual, que ocurrió esto o que estés aquí , como te casaste con el otro o dejaste de hacerlo que se asombra uno. Eso que dice alguno:"Yo me he hecho a mí mismo, y estoy aquí porque yo quiero..." Entonces las sillas como son movidas por mandos a distancia y se van a donde quieren. Yo digo:"Me siento llevado de un lado a otro, como flotando en el mar, como un cadáver a la deriva".

  • Es muy gracioso lo que nos ha pasado con la interpretación de esta obra - añade Petra - nosotros hablamos y nos movemos, pero estamos llevados por Iván e Itziar, que son una parte importante de los personajes. Ellos son los que nos mueven y es fundamental, porque son una parte del cuerpo. El que me lleva a mí es actor y yo noto, como ya se sabe el texto, que quiere comunicar ayudándome con los movimientos. Es algo muy bonito. Tengo la sensación de que mi personaje está hecho por dos: por Iván y por mí. Como actriz me parece que ha sido muy enriquecedor y le doy muchas gracias.
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PETRA MARTÍNEZ / JUAN MARGALLO / ROBOT
FOTO: marcosGpunto

UN ROBOT MUY CASQUIVANO,
UN HELICÓPTERO y UN DROM PROHIBIDO

Otro de los elementos es un Robot con el que hablan y éste contesta.

  • El Robot a veces se despendola se va a un lado u a otro.  Habla.
  • Es increíble- corrobora Petra. Da un miedo. También sale un helicóptero.
  • Íbamos a sacar un drom, como si fuera un platillo volante, como si nos vigilara, pero no ha sido posible. El helicóptero me viene siguiendo a mi desde el año 1965 en una manifestación del primero de Mayo en Atocha. Yo no estaba en Atocha. Yo iba a Cáceres a mi ciudad natal y el cabrón del helicóptero a la altura de Antón Martín se me quedó mirando y desde entonces no se ha separado de mí.  Entonces aparecía el drom, ahora lo hacemos con sonido, porque hay una Ley que han sacado y están acojonados con los drones, porque los drones te pueden coger una cámara, pero también una bomba. Han sacado una ley muy fuerte y la seguridad en el trabajo no nos lo permiten utilizarlo. El helicóptero tiene que ir con un palo.

También está la física cuántica, pues ha sido una experiencia del propio Juan

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PETRA MARTÍNEZ / OLGA MARGALLO / JUAN MARGALLO
FOTO: www.madridteatro.net

EL PROBLEMA ES LLEVAR
A LA GENTE JOVEN AL TEATRO

Un tema recurrente es la asistencia del público joven al teatro. La experiencia de esta obra concreta es que, los jóvenes que han asistido dan un juicio positivo. De todos modos Petra piensa que el tema es más general. Está convencida de que si la gente consigue llegar al teatro

  • salvo que sea algo aburrido, les gusta. El problema es llevarla al teatro y más en estos tiempos que resulta caro. Una vez que van en un 70%, a veces, salen contentos del teatro.     
  • Creo que los programadores se equivocan - añade Juan Margallo. Hemos hecho giras por toda España, pueblos grandes y chicos. Se puede pensar ciertas obras en este pueblo no van a funcionar, y nos hemos quedado acojonados cómo de pronto en un pueblo pequeño una obra que pudiera ser no apta para ellos, la gente se queda deslumbrada. Tengo una experiencia con El Señor Ibraim y las flores del Corán. (CLIKEAR) en un pueblo pequeño, y se acuerdan todavía. Lo difícil es que la gente joven no tiene costumbre.
  • Y también porque vivimos unos momentos que la televisión tiene mucha atracción- abunda Petra.
  • El teatro lo comparo a los toros, yo no voy a los toros, - interrumpe Juan. Para ver una buena hay que ver 20 malas. En el teatro lo mismo. Un 70% son bastante rollo, pero cuando ves una obra de teatro como Dios manda, no hay nada parecido. Por ejemplo Incendies, la vi dos veces, me quedé acojonado. Tratar de que el público joven vaya al teatro y la primera obra sea buena sería fundamental y no llevarles a un coñazo de esas como una obra clásica que dura tres horas... sino que les atraiga porque es el principio para que pueda seguir yendo.  

¡CHIMP'N!
FINAL DE ALGO

A pesar del título ¡Chimp'n! como final de algo, y la temática de la muerte, no quiere decir que esta sea su última obra.

  • Siempre que terminamos una obra decimos, "No vuelvo", pero así llevamos 50 años - aclara Preta.
  • En esta obra decimos:"¿Y si estuviéramos muertos?" Nos levantamos de las sillas y las sillas se mueven. "¿Cómo vamos a estar muertos, si estamos aquí de cuerpo presente, vivitos y coleando" "¿Y quién te dice a ti que estos cuerpos no son unos actores que hacen de nosotros?  El Centro Dramático tenía programada la obra, nosotros hemos "palmao" y han cogido a dos "mataos" por ahí, los han vestido y los han "tirao" al escenario. Puede ser la última - reitera Juan.
  • Pero ya estamos pensando en otra- remata Petra.
  • También ésta pueda ser la última rueda de prensa - añade Olga Margallo -, y esto es lo más bestia que plantea la obra. Es lo que decimos siempre, tenemos que disfrutar...y se nos vuelve a olvidar. La obra de eso, de que intentemos no olvidarnos
  • Si fuésemos conscientes de que somos mortales - filosofa Petra -, los bancos se iban a ir a la mierda, porque no iba a haber ni una hipoteca, si tienes claro que esto es lo único que tenemos. El pasado no existe, el futuro es un reflejo del mañana o no sé qué,  lo único que existe es el eterno presente. Si eso lo tuviésemos en el cuerpo...imaginad todo lo que hacemos en vista al futuro. Se acabarían gobiernos... Es que alguien nos ha metido esto en la cabeza, porque de lo contrario no habría forma de gobernarnos.

De hecho se ha definido el presente como la distensión entre el pasado y el futuro.

  • Es que incluso este presente inmediato deja de serlo - subraya Petra.
  • Hacemos, en la obra, un ejemplo con un espejo. Cuando te miras en un espejo, la imagen está muerta: lo que tarda la luz en llegar al espejo y rebotarte hasta tus ojos. La imagen que ves es falsa, no es real. Ha pasado. Es decir, todo lo que hacemos está hecho hace un rato, y cuando nos damos cuenta ya no somos nosotros - recuerda Juan.       
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PETRA MARTÍNEZ / JUAN MARGALLO
FOTO: marcosGpunto

OLGA, VENTE POR FAVOR

El que Olga  Margallo se haya decidido por la dirección viene de antes.

  • La última obra que hicieronLa madre pasotayCosas nuestras de nosotros mismos, arrancaron ellos y la hicieron ellos, fui a ver un ensayo con Antonio, mi marido, y les dije "Estáis locos, aquí hay que hacer un cierto arreglo", y comencé a dirigir un poco.  Venir aquí ha sido muy divertido, aparte de poder aprovechar para venir a España.
  • En este caso - añade Petra - ella está viviendo en América y le dijimos "vente, por favor".

CREACIÓN CONTINUA
HAGO TEATRO PARA
DISFRUTAR DE MI TRABAJO

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  PETRA MARTÍNEZ / JUAN NARGALLO
FOTO: marcosGpunto

El proceso de creación ha sido continuo. En un primer tiempo Juan Margallo fue creando diversas versiones y posteriormente con los ensayos también.

  • Ayer mismo hemos cambiado algo - confirma Olga. Y eso es lo bueno y lo malo también. La pobre regidora del CDN me decía:"Los pies se cambian mucho, pero el texto no tanto, normalmente" Eso es lo malo, pero lo bueno es tener a los autores en el escenario y poder ir dando sentido.

A pesar de los cambios Petra matiza que el texto fundamentalmente no se cambia, pero

  • el teatro, lo bueno que tiene a diferencia con el cine y la televisión es que estás siempre en marcha. Del teatro lo que más nos interesa es que nos interese mucho lo  que estamos haciendo y nos divierta, porque creemos que  lo primero es que no hay unas reglas para saber que va a venir público. Sabes que si viene Peter Brook tienes más público, pero nunca se sabe. Han venido grandes nombres y no ha ido gente. Pensamos en el público, pero sobre todo pensamos en lo que a nosotros nos gusta. y nos apetece en ese momento. Por eso es muy difícil que cojamos obras de autores ,aunque pensamos que es maravilloso que haya autores y gente que haga esos textos. No es nuestro caso.  Esto nos hace tener una gran libertad.         
  • Con los cambios siempre se mejora. Los cambios que ayer hicimos, lo hice tímidamente porque estamos a punto de estrenar "si me dejáis cambiar sólo esto..." Es que siempre es para mejor - se excusa Olga.
  • Si a eso le aumentas la intervención que tiene mi compañera (Petra), si un día meto un  escafurcio -  equivocarse - y el público no se da cuenta, dice :"Repítelo que se han dado cuenta" "¡Que no se han dado cuenta!" y me hace repetir una frase que he equivocado  "¿Y si vienen mañana y ven que no lo hacemos igual?",
  • Eso es un poco en broma. Yo hace unos años hice una obra de teatro, y estaba como muy incómoda con la Cuarta Pared, porque venía de Stanislawski, que lo uso mucho pero ahora en su medida. Estaba muy preocupada por el estado de ánimo: "Me lo tengo que creer". Era una señora mucho mayor que yo, tendría 40 años y era una señora de 70. Sufría, hice un régimen de comida...hice de todo, hasta que un día le dije a Juan:"Juan, se acabó la Cuarta Pared. No me voy a creer que soy esa señora. Lo que voy a intentar es que lo crea el público".  Ya no quiero saber nada de la Cuarta Pared. Vengo a disfrutar al teatro, no vengo a sufrir. Si un día lo hago peor, pues peor, pero no voy a estar sufriendo por el teatro. Hago teatro para disfrutar de mi trabajo. Eso fue el principio. Luego hemos hecho distintas forma de hacer teatro. Hace como tres o cuatro montajes, un día, en el estreno, era la primera vez que estaba bastante tranquila. Le dije a Juan: "¿Sabes por qué estoy tranquila? Porque los que van a venir no les importa demasiado esto. Si se lo pasan bien, pues bien, y si se lo pasan mal, pues mal. Los críticos van a poner bien  o mal, e incluso no van a venir. ¿Qué más nos da?" Desde ahí lo que sí queremos es que el teatro sea un espacio para nosotros de diversión, de estar a gusto. Para eso necesitamos ser libres, es decir que en un momento determinado yo si tengo la necesidad de decir algo, por ejemplo porque se equivoca, pues no, y le echo la bronca. "El público está ahí, ha pagado y vamos a hacerlo otra vez" O salir al escenario y a los diez minutos notas que hay algo entre el público y tú que no sabes que es. Entonces digo:"Perdonen vamos a empezar otra vez porque estamos ustedes y yo en la onda. Vamos a echar otra lotería, para ver si funciona".
  • Lo ha hecho- refrenda Juan.                    
  • Hemos empezado otra vez y por ese quiebro, de pronto ha habido una comunión entre el público y nosotros que me he dicho "¿por qué voy a perder yo eso? ¿Perder esa posibilidad que no da ni el cine ni la televisión?"

Lo alucinante del teatro es que salga tan distinto en cada pase. Es increíble - corrobora Olga.

EL TEATRO TIENE MUCHO DE TOROS

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      PETRA MARTÍNEZ / OLGA MARGALLO / JUAN MARGALLO
    FOTO: www.madridteatro.net
    El teatro es así. Como los toros. El teatro tiene mucho de toros. Sales y tienes que ver  cómo el público, lo mismo que el toro, va reaccionar...Pero cuando sales y ves que yo voy por aquí y el público va para allá...Esta hora y media va a ser espantosa, sobre todo para nosotros. Se corta. Esas es una cosa que sí queremos tener en el teatro: disfrutar, no reprimirnos y que el público y nosotros estemos en la misma onda.
    Puede haber cuatro en el público, que a mí me ha pasado. Cuatro personas en una obra de risa y ha sido mucho más maravillosa que otra vez que hice una obra de un tema dramático de una señora mayor que se iba a una Residencia. Vinieron unos viejos, porque el programador dijo:"Como es de viejos, que vengan sólo viejos"  y se trajo a un asilo. Aquello fue horroroso
  • A las 8:30 horas vemos cómo hacen 80 personas, boom y se levantan, porque se les  iba la cena.
  • Yo prefiero la calidad, no de que sea maravilloso el público, sino  la calidad en relación con lo que yo estoy haciendo, que la cantidad. Puedes tener a 500 que están en otra cosa, porque han venido a ver otra cosa.  Es mejor tener a cuatro personas que saben a lo que vienen y yo. Lo estamos dando . Por eso, a veces una obra de teatro se empieza con mal pie. Es mucho mejor cortar. Por eso digo que en todas las Compañías tendría que haber el más sensato y decir: " tú  tienes la posibilidad de empezar y cortar otra vez". Si tienes ese don. Lo veo como algo muy bueno.  
  • De todas formas no cambian ni un 1% de lo que hacemos cada día.
  • Pero si viene el caso...¡Qué maravilla cuando empiezas otras vez y todo va todo sobre ruedas. Te da mucho gusto.

LAS PERCUSIONES DE MOTU PROPIO,
LO OTRO PARA QUE SE TE OIGA LO MENOS POSIBLE

La guitarra interviene en uno de los fragmentos de la vida.

  • en realidad canto yo, pero yo le digo "Te agradezco que me hagas las percusión y las otras voces" y ella me dice: " Las percusiones de motu propio, lo otro para que se te oiga lo menos posible"
  • Pero yo canto peor, incluso.
  • En esta obra llega un punto en que pueden hacer lo que quieran, que habrá que tener un punto de medida.
  • También hablamos con el público

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¡Chimp'n! Panfleto post mortem. Margallo

José Ramón Díaz Sande
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Última actualización el Miércoles, 14 de Enero de 2015 09:43