DON JUAN TENORIO
QUIEN LA HACE LA PAGA

FOTO BASE: CEFERINO LÓPEZ

La Compañía Nacional de Teatro Clásico presenta Don Juan Tenorio, concebida y dirigida por Blanca Portillo y con versión de Juan Mayorga. Se trata de una coproducción de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, Avance Producciones Teatrales de Blanca Portillo y el Teatro Calderón de Valladolid.

ATENTADO A CHARLIE HEBDO,
GOLPE A TODOS LOS QUE QUIEREN
EJERCER SU LIBERTAD

La rueda de prensa acerca del Don Juan coincidía al día siguiente del sangriento atentado en París contra semanario satírico Charlie Hebdo. A raíz de tal agresión la respuesta fue elevar los brazos en alto exhibiendo un bolígrafos bajo el lema Je Suis Charlie. Juan Mayorga, autor de la versión de este Don Juan, tiene palabras de recuerdo para ese atentado contra la libertad del ser humano

• Dado que estamos en un teatro, un espacio de libertad y en una rueda de prensa, quiero utilizar mis primeras palabras para enviar un mensaje de afecto y de amistad hacia la gente de redacción de Charlie Hebdo. Lo que ayer fue golpeado, fueron todos los dibujantes del mundo, todos los artistas, todos los periodistas, todos los creadores, todos los actores, todos los directores de escena, todos los ciudadanos que quieren ejercer su libertad haciendo un dibujo, mirándolo, abriendo un periódico,  acudiendo a un teatro... En este sentido, desde ayer, todos estamos dentro de esa redacción.    

EL TENORIO,
CUENTA PENDIENTE DE BLANCA PORTILLO

	BLANCA PORTILLO FOTO: www.madridteatro.net

El Don Juan Tenorio de Zorrilla durante, mucho tiempo, fue título obligado en el Día de los Difuntos, día suplantado, actualmente,  por el festivo Hallowen. Desde hace unos años no pareció oportuno subirlo a las tablas, salvo en algunas localidades, entre ellas la de Alcalá de Henares, que se mantiene fiel exhibiendo su Tenorio por diversos espacios de la ciudad. Sorprende que, por estas fechas se descuelgue un Tenorio, y sobre todo que la empresa la lleve a cabo Blanca Portillo, actriz y directora no muy adicta a un teatro tradicional como ha venido siendo el Don Juan de Zorrilla. Tal incógnita se desvela, una vez que Blanca tenía una cuenta pendiente con los Tenorios reales que pueblan, hoy día, nuestro planeta.

• Si uno va al Diccionario de la Real Academia Española- advierte Blanca - y se busca la palabra Burla, que es un término muy identificativo del personaje, que se ha calificado de Burlador, tiene 7 acepciones y dos de ellas me llaman profundamente la atención. La primera dice: "inducir por cierto lo que no es nunca". Es un embustero. Miente. Hace creer cosas que no son verdad. Esto es algo muy extendido. No hay más que mirar los periódicos y los telediarios y ver cuantísima gente hay por el mundo haciéndonos creer cosas que no son verdad. Ese es un punto de partida la hora de analizar a Tenorio. Todo lo que dice es falso. Así es que esa imagen que tenemos de un hombre que cambia y se convierte en un gran enamorado, que salva su vida a través del amor, yo no me la creo.

La segunda acepción del Diccionario es

• "seducir con engaño a una mujer". Existe un verbo para calificar a alguien que engaña a mujeres. no hay un verbo que signifique "seducir a un hombre con engaño". Nuestro país, esta España nuestra, tiene un verbo que sirve para indicar cuando un hombre engaña a una mujer y la seduce, término que tiene muchas acepciones, entre ellas una acepción sexual, una acepción por la que miente y hace creer cosas que no son, pero de hombres a mujeres. Tenemos ese privilegio de tener un verbo específico para esto.

FOTO: CEFERINO LÓPEZ

TENORIO,UN EXTRAÑO HÉROE DE NUESTRO PAÍS

Blanca recuerda que Tenorio

• desgraciadamente sigue siendo una especie de un extraño héroe en este país, por eso elegimos el de Zorrilla, porque, probablemente, es el más significativo y el que tiene más que ver con nuestra ideología como país. No solamente engaña y miente, sino que además mata. Y compite, echa carreras con otros a ver quién mata más. Él mismo dice que no respeta nada. Su falta de empatía es absoluta. Aún así es un personaje que sigue estando en la calle. Cuando uno dice de un hombre que es un don juan lo tomamos como algo divertido: "¡Que listo! ¡Cómo mola!" "¡Qué inteligente!" Yo estaba harta de esto. Nunca lo he entendido así. Desde que era chica y empecé a hacer teatro, entendí que este personaje es peligroso, y que debemos cargárnoslo de alguna manera si es que sirve de modelo. Yo no lo quiero a imitar, sino de modelo a no imitar. Es un destructor social, no solamente afectivo, sino social.

TENORIO: UN DESTRUCTOR

Este modo de ver al Don Juan, según Blanca no se lo inventa.

• Esto está en el texto y en las palabras de Zorrilla. Desgraciadamente se le ha teñido de un romanticismo mal entendido ,que lo ha convertido en un pseudohéroe. Le hemos quitado esa pátina de hombre brillante, ese "sí" desde el principio, que nos cae bien desde el principio. Quitar eso y analizar profundamente lo que dice y lo que hace. Sus comportamientos y sus palabras. Lo que resulta ese este Tenorio que la gente va a poder ver: un destructor. Alguien a quien, si yo lo veo, tanto como mujer y como persona, no lo quiero cerca. Creo, profundamente, que hay que cambiar modelos. Si Tenorio sigue siendo un modelo entre todos deberíamos trabajarlo para destruirlo de alguna manera.

A esta frivolidad amorosa Blanca recuerda la otra faceta de Don Juan: la de asesino

• No hay que olvidar que se jacta de asesinar. Asesina al padre de la que dice amar. Sin piedad. Es asesino. Esto puede acabar en el tipo que dice "tú eres mía y de aquí no te meneas y yo me puedo ir donde me de la gana". Eso es un maltratador. Todo eso está en mi recuerdo. También hay mujeres que ven en ese hombre un modelo: "Que los malotes nos ponen mucho". Existen. Nosotros propiciamos que haya hombres así porque lo consentimos. Las madres también dicen:"Tu calladita". Hemos contribuido a ello. Eso también está presente en la función.

FOTO: CEFERINO LÓPEZ

UNA PERIPECIA TEATRAL
ABSOLUTAMENTTE EXQUISITA

Tal acción de acoso y derribo de don Juan no quita, según Blanca

• que haya una parte del texto de Zorrilla que tiene una peripecia teatral absolutamente exquisita. Muy inteligente teatralmente. La peripecia de la función es fantástica. Es teatralidad pura y los versos tiene partes que son realmente bellas, mucho más desconocidas de otras que todo el mundo se sabe, con lo cual nos planteamos con Mayorga, a quien tengo una devoción que siempre lo he manifestado públicamente siempre que puedo, no solamente como autor, que es, probablemente de los mejores que tenemos en este momento. Es como ser coetánea de Lope de Vega. Es fantástico y además el que sea amigo tuyo. Tiene una capacidad maravillosa para analizar los textos cuando hace una versión. Por eso, probablemente, tenemos un texto que está más respetado que otras puestas en escena. Más largo de lo habitual, pues normalmente se corta más que nosotros. Nos interesaba muchísimo respetar las palabras del autor y analizarlo tal cual es y verle desde la mirada de hoy. Desgraciadamente tanto en la época en la que el autor sitúa la acción que es en el s.XVII, como en la que la escribe que es el s.XIX, como hoy, y me temo que en siglos venideros Tenorio sigue siendo un ser absolutamente deleznable, a, al menos, ese es nuestro punto de vista. La mirada de hoy nos hace poner en relieve esos defectos, esa oscuridad del personaje y los miramos desde los ojos de ciudadanos de hoy, de gentes de teatro de hoy.

LA HISTORIA DE JUAN
FRUTO DE UNA EDUCACIÓN

FOTO: CEFERINO LÓPEZ

El que Don Juan haya llegado a ser un destructor, es algo que interesó en primer lugar a Blanca, pues considera que nada es gratuito.

• Nadie es como es porque sí. Eso es lo que siempre me ha inquietado cuando he visto el Tenorio. Nunca se explica por qué hace eso. Él no manifiesta crear un nuevo orden, un destruir para construir algo nuevo. Nunca verbaliza algo como eso. fue uno de los trampolines que me llevaron a investigar debajo del polvo y del barniz.  Creo que un ser humano se genera en la infancia, y esto tiene mucho que ver con nuestro país, con la educación. Hay un personaje presente en la función y muy presente en la vida de Juan que es su Padre. Un personaje que ha pasado desapercibido y que sólo dice "hay que ver hijo cuánto me has decepcionado, desde hoy ya no eres mi hijo" Es un anciano dolido por la actitud de su hijo ante el mundo. Nunca he entendido que eso sea así. De algún lado ha "mamao", de alguna manera ha sido educado para que su respuesta social sea esa. Nuestro país es como es porque ha tenido una educación y porque ha tenido unos padres que nos enseñan a ser de una determinada manera. Concentré todos mis esfuerzos en el personaje del Padre, y en construir una historia a Juan para que eso, que no está explícito en el texto, si sea explícito visualmente. Juan quiere destruirse a través de la destrucción o quiere emular o revelarse contra algo que ha "mamao" desde niño. Eso está profundamente presente en la función, y te da, indudablemente, una pista muy clara de por qué puede ser como es. Cosa que creo que nunca se ha planteado. ¿Por qué es así?... Esa así porque así. Esto no puede ser. Si amplías la visión me hace preguntarme ¿por qué en nuestro país nos comportamos así. ¿Cómo nos han educando nuestros padres? ¿Vamos a seguir educando igual? ¿Por qué Luis Mejía lucha sistemáticamente por emular, competir y ser mejor que otro hombre que lo único que hace es destruir. ¿Eso es lo que queremos dejando de herencia? ¿El Padre se plantea qué es lo que ha dado en herencia a su propio hijo? Debería plantearse cuáles han sido sus errores educándolo, cosa que no hace. Cosa que, normalmente, los padres no hacen.

¿DÓNDE ESTÁN LAS MADRES DE JUAN E INÉS?

Algo llamativo en el texto que de su madre no se habla, ni se menciona.

• no hay madres en esta función. Es otro de los puntos a los que me agarré con fuerza.  Existe el padre de Inés, el padre de Juan...¿Dónde están las madres?, que es un elemento fundamental? ¿La carencia  materna genera una forma de vivir y de ser? La madre de Inés ¿dónde está? Un padre que mete a su hija, llámalo convento, colegio interno... la aísla de la sociedad, "desde que es casi un bebé" dice la Abadesa. "Te medió aquí tu padre", y ¿la madre? ¿qué pasó? ¿Qué pasa con ese padre que, de alguna manera, deposita la responsabilidad en un colegio, en unas monjas ¿Por qué un Padre no es capaz de educar, solo, a una hija. Da igual si es en el XVII, en el XIX o en el XXI. ¿Qué pasa con la madre de Juan? Esa carencia femenina está, también, presente en la función.

INÉS: SE LE HA HURTADO EL DERECHO A PENSAR

	ARIANA MARTÍNEZ FOTO: CEFERINO LÓPEZ

A pesar del egocentrismo de Don Juan, éste consigue liberar a Inés de su enclaustramiento a todos de los niveles. Inés nace al amor. Blanca lo corrobora.

• Eso está en la función. Me encanta esto,  porque siempre se ha presentado a una Inés como una especie de objeto usable, que no sabe muy bien por dónde le da el aire, y es, prácticamente tonta. No ve más allá de sus narices. La lectura que hemos hecho es la de una mujer a la que se le ha hurtado el derecho a pensar, a ver el mundo y a tener criterio propio, y por el azar Tenorio se cruza en si vida y lo que hace es liberarla. Es una gran mujer que descubre el mundo y toma opciones, a partir de ese momento. Creo que hemos creado una Inés en pleno esplendor vital adolescente. Las adolescentes no son tontas, sino que tienen una potencia y fuerza enorme. Eso es lo que descoloca a Tenorio: la inmensa generosidad emocional y pureza de esa criatura. no se enamora de la niña, sino lo que hace la niña es descolocarle a él. Destruir sus esquemas y darse cuenta de lo que ha perdido en el camino. Inés lo que hace es salir disparada hacia la libertad absoluta y decide y toma una postura, y decide quedarse con él. Por otro lado, es curioso, que todos los autores, desde los alemanes a los franceses, que han tocado a Don Juan ,en general, se le condena, sin perdón ninguno. Tirso lo mata sin piedad. Zorrilla es el único que lo salva. Juan se convierte en un personaje caso trágico, cuando se le condena, al final. Si lo salvas lo conviertes en otro personaje. Ese es el punto con el que no comulgo con Zorrilla. Eso no hay que salvarlo nunca. No lo salva ni el Amor, ni Dios, ni la caridad. Nada lo salva..      

MUCHO MÁS TRÁGICO CUANDO NO LO SALVAS

Una de las anécdotas que se cuentan a este respecto es que Tirso de Molina - fraile - decidió salvar a su Don Juan, pero en el confesionario una mujer casada le contó sus desdichas con su marido que era una especie de Don Juan. Tanto le indignó que decidió condenarlo. No es del todo cierto que la anécdota sucediera, pero es algo que se cuenta. Para Blanca

• Es posible. El que Zorrilla lo coloque entre el amor y Dios para salvarlo, es propio del romanticismo, no con lo romántico de el Corte Inglés. Hablo de la época: el hombre enfrentado al amor, a Dios y a los elementos y lo salva a través de eso. Me parece mucho más trágico cuando no lo salvas. Hablas de un destino al que está abocado. Busca su propia destrucción como cualquier psicópata. No puede evitarlo. Es como el personaje de Valmont en Las amistades peligrosas, "No lo puedo evitar". Está casi buscando que alguien lo pare, y socialmente eso es interesante. me encanta eso de que los personajes digan "voy a seguir matando y estoy deseando que me enterréis de una vez". Eso también está en la función: "¡Dejadme morir en paz!" "Entre todos ayudadme a parar esto". Eso lo convierte en un personaje mucho más trágico que dramático, y es más enjundioso.    

FIEL AL AUTOR
Y AL ESPECTADOR CONTEMPORÁNEO

JUAN MAYORGA FOTO: www.madridteatro.net

Juan Mayorga se ha encargado de la versión, muy guiada por la idea central de Blanca Portillo. Ha sido un trabajo conjunto para una Compañía que Juan define como

• valerosa y tan llena de talento. Mi amiga y compañera del Colegio Fernando el Católico, Blanca Portillo, siempre es muy generosa conmigo, ha exagerado mi aportación a este montaje. No es falsa modestia decir que mi aportación es muy modesta. Ha de serlo, porque estoy entre los versionadores que piensan que los clásicos no han de ser reescrito, sino releídos. No se trata de enmendar la plana al escritor, sino de descubrir otros sentidos del texto que el propio tiempo y la historia va desvelando. El adaptador debe trabajar desde una doble fidelidad: al texto original y al espectador contemporáneo. Esas dos fidelidades, a veces, entran en tensión, pero son esos momentos de tensión te hacen fascinante este trabajo. Lo que ha hecho fascinante, es el trabajar en diálogo con Blanca Portillo, que nos ofrece un Don Juan Tenorio importante y memorable. Será recordado.

TEXTO IMPERFECTO
CON EXTRAORDINARIA TEATRALIDAD

Tanto Blanca como Juan partiendo de un punto en común

• un texto imperfecto, y, por otra parte, de una extraordinaria teatralidad. Acerca de la imperfección del texto, ya lo manifestó el propio  Zorrilla, en un texto precioso que daría lugar a otro espectáculo teatral, el capítulo que dedica al Tenorio en Recuerdos del tiempo viejo. En él se burla de sí mismo y critica las incongruencias temporales del texto, sus ripios y se muestra brumado por el éxito de esa pieza. No se trata de enmendar esas faltas, y tanto más cuando se trata de un texto acuñado en la memoria de mucha gente. Se trataba  de trabajar sobre la idea de teatralidad y de puesta en escena en esta dirección. La extraordinaria teatralidad se basa en el carácter extraordinariamente conflictivo de su protagonista. Se trata de un personaje que pone en peligro la vida o identidad moral de cuantos están a su lado. Eso no lo convierte en un personaje poderosísimo en cada escena. Como ha dicho Blanca este personaje oscuro ha sido visto como modelo y ejemplo. Como envidiable, pero lo que sabemos de él a través de Zorrilla es que seduce a una mujer haciéndose pasar por otro, la seduce con engaño; asesina a sangre fría a la mujer a la que dice amar... Se trata de un malvado, no de un transgresor, un hedonista o un amante irresistible. Parece ser más bien un violador en serie, un psicópata, un criminal... alguien que parece que su placer último no sea la conquista o la victoria en el duelo, sino la violación de la humanidad el otro. Su lista es a cuántos seres humanos he arrasado. Es un ser contra la humanidad, y, sin embargo, se ha convertido en la figura más conocida y exitosa del teatro español, y un mito español reconocido en cualquier lugar del mundo.

JUAN, UN NOMBRE CONOCIDO
EN TODO EL MUNDO

Una anécdota que puede ilustrar ese universalismo la experimento Juan Mayorga en su estancia en Alemania.

• Me llamo Juan Antonio y mi mamá me llama Juan Antonio. Eso de Juan Antonio no les entraba, sin embargo, enseguida conectaron con lo de Juan, un nombre que todos conocían. Todo el mundo conoce esa palabra y la asocian a ese esplendor y a esa transgresión positiva.  El primer valor de Blanca Portillo, es que ha sido capaz de mirar a ese protagonista, y en cada escena de la obra y en cada línea leer, de algún modo, liberando su mirada del polvo y de los barnices que habían sepultado ese texto. Un extraordinario esfuerzo de desmemoria y pelea de todo lo que había caído sobre el texto.  Cuando estuvimos en Valladolid, donde se estrenó, teníamos la sensación de estreno absoluto de un texto resignificado.

DON JUAN, VIOLENTO, ÁSPERO Y SUCIO

	FOTO: CEFERINO LÓPEZ

El Don Juan de Blanca se ha coinvertido en un hombre

• áspero, sucio, violento, pero al mismo tiempo fascinante, pues no deja de serlo, en un mundo, así mismo, violento, áspero y sucio, donde la compasión es rara. Estamos ante un montaje importante, en el que junto a ese primer momento de mirada renovada, hay una elección de un equipo admirable y unos actores extraordinarios. Va a ser un montaje controvertido, y ya lo está siendo, pero necesario e importante. No es un montaje más de Don Juan Tenorio, aunque no estamos ante el montaje definitivo, porque no hay tal cosa. Nos hemos acercado a este texto con modestia pero también con ambición. las futuras puestas en escena de Don Juan Tenorio, habrán de dialogar con ésta.

Blanca ha tenido una gran presencia en la concepción de la obra. Su colaboración con Juan Mayorga, éste la describe como

• Blanca tiene un gran carácter y esto la convierte en uno de los líderes del teatro español.Hay momentos en que el texto tal como ha sido puesto en escena por Blanca Portillo nos sitúa ante una película de serie B, donde vemos a unos personajes que son tiburones, que pelean, pero hay algo extraordinario en el texto de Zorrilla y cómo ha sido servido en que aparece lo sublime. Yo como espectador he sido sorprendido por la puesta en escena. Hay escenas que ella ha construido  con este elenco que jamás hubiera imaginado así. Eso es algo por lo que siento inmediata gratitud. Luego hay versos, sobre todo de la última parte, que me han parecido extraordinarios.  Zorrilla está a la altura de los más grandes. En lo referente a la colaboración desde el principio estuvimos de acuerdo en que los fantasmas no fueran tales, sino que fuesen hijos del interior atormentado de Tenorio. Son sus dobles y con ellos al final se encuentra con ellos. Ahí José Luis hace un Tenorio memorable. Algunos momentos los hemos eliminado como el monólogo del escultor, pues lo que el escultor decía nos parecían obviedades dichas de un modo muy solemne. Más interesante nos pareció que el Escultor fuese un trasunto del Padre. Alguien que custodiase esas esculturas. Nos pareció más interesante el silencio que el verso. Así como Blanca me convención de eliminar el portero de la asa de Ana de Pantoja, porque, en realidad, el verso se convertía en conversacional y sin tensión dramática. En otros momentos ha habido que negociar con la opacidad de ciertos versos. En general mi trabajo ha sido muy modesto y, por otro lado estoy muy orgulloso de estar en este equipo.    

JUAN TENORIO:
DESTROZARSE A SÍ MISMO

JOSÉ LUIS GARCÍA-PÉREZ FOTO: www.madridteatro.net

José Luis García-Pérez es actor de largo recorrido en cine, teatro y televisión. De los últimos trabajaos ha sido Diario de un loco (director Luis Luque), El gran teatro del mundo (director  Carlos Saura) (CLIKEAR), La Avería (Directora Blanca Portillo) (CLIKEAR) entre otros. En esta ocasión encarna a Don Juan Tenorio.

• Zorrilla decía que en su texto la oscuridad la daba Tenorio y la luz, Inés. Esto es parte de lo que representamos. Me gustaría hablar en nombre de todos mis compañeros. Creemos que este montaje es un paso adelante para todos. Blanca es una directora tiene el don, cada día, de ponerte el listón dos centímetros más alto. si tienes narices lo saltas y si no, pues ahí te quedas. Eso te hacer crecer como actor, evidentemente, y como persona y persona de teatro, que es la madre de todas las interpretaciones. No sólo se va a ver la historia deDon Juan Tenorio, sino la de cada uno de los personajes que pasan por el escenario y que se cruzan en la vida de Juan Tenorio, a nosotros nos gusta mucho quietarle el Don. Tenorio no es el único malvado que aparece en la función. El protagonista tiene sus negrura y contradicciones, y a partir de ahí cada uno elige quien es peor que quien. Juan es un personaje sin ninguna causa y su única idea es destrozar lo que le rodea, pero sin ninguna causa aparente, ni profunda. En último término sea destrozarse a sí mismo. Algún tipo de miedo se debe tener. En todo este marco hacemos unJuan Tenoriocontemporáneo con un maravilloso vestuario y una escenografía espectacular, una música digna de oír por sí misma y unas interpretaciones de mis compañeros estupendas. Sí merece la revisión de texto, que es muy importante, porque leyendo el Tenorio desde el punto de vista que lo hacemos ahora, es difícil leerlo de otra forma. No es un montaje definitivo, pero sí verlo desde un punto de vista nuevo y una forma de acercarse a todos los personajes muy diferente, partiendo de los personajes más emblemáticos, Inés, Brígida, el Comendador...Son personajes con una visión nueva. Mucha gente nos ha comentado que  a los cinco minutos, te das cuenta de que no estás viendo el Tenorio, sino una función nueva.

VAQUEROS Y UNA PIPA (PISTOLA)
PARA LOS VERSOS DE ZORRILLA

Algo que se ha tenido en cuenta es huir de cierto acartonamiento de los últimos don Juanes escénicos. Se ha recurrido al vestuario contemporáneo que, en opinión de Blanca

• no desmerece con el texto. Hay mucha gente que cree que Tenorio hay que hacerse con un sombrero, una pluma y una espada. Eso nos ha ayudado a alejarlo de nosotros. "Bueno, es que en aquella época se mataba más... se trataba pero a las mujeres..." "No, no, perdonen se sigue matando y violando exactamente igual, se sigue maltratando a las mujeres exactamente igual..." Es curioso que esas mismas palabras cuando se presentan con unos vaqueros y una pipa (pistola) metida en un bolsillo son perfectamente posibles. No digo que esta sea la forma única de hacerlo, sino que es la nuestra. Es sorprendente ver que esas palabras, y hemos insistido en mantener el verso con absoluta devoción y ahí ha estado Vicente Fuentes asistiéndonos, cuadran con el vestuario contemporáneo y los comportamientos son perfectamente legibles. 

FOTO: CEFERINO LÓPEZ

LOS FANTASMAS DE LA CONCIENCIA

Una de las características de la obra son los efectos especiales: muertos que se aparecen y demás fantasmagorías, muy apetitosas para toda una parafernalia escénica que hacen las delicias de los espectadores. Al traer la obra a los tiempos modernos, más desmitificadores parece que no cuadran

• Esa es otra cosa. Soy una persona no creyente y creo que los fantasmas no aparecen para salvarte, ni par regañarte. No se aparecen, en general...¡vamos! yo no los he visto. Me parece muy bonito como juego de artificio teatral, que tiene que ver con épocas. Creo en los fantasmas de la conciencia, en los errores corporizados en tu memoria y en tu corazón.Eso sí está presente. Una estatua no se mueve.Es mucho más interesante verlo a través de su alma, su conciencia.
  
  
• Tengo la sensación de que toda la segunda parte de la función - añade José Luis - podría estar sentado solo. Todo ocurre en su interior.
  
  
• Hemos teatralizado ese interior y por eso efectos especiales los hay. Alguien me dijo al salir de la función: "He visto muchos tenorios y siempre he tenido la sensación de que la primer parte es una pura sangre, y la segunda se convertía en un jamelgo, porque no corre. Después de ver ésta me interesa más la segunda parte." literaria y poéticamente hay versos de una grandeza mucho mayor que la primera parte, y, por otro lado, es toda la parte que tiene que ver con el enfrentamiento consigo mismo ,en cuanto le quites el golpe en la puerta, y  ves a Tenorio luchar contra sí mismo, y tomar conciencia de sus errores, se convierte en algo más interesante.

BUSCAR A LA NUEVA GENERACIÓN DE ACTORES
LA INOCENCIA ES PURA PASIÓN

	ARIANA MARTÍNEZ FOTO: www.madridteatro.net

Doña Inés de Ulloa es Ariana Martínez. Formada en la RESAD, completó su formación en la Escuela Nancy Tuñón y con Juan Pastor. Obtuvo el Grado medio de Danza Contemporánea en el Conservatorio Superior de Danza de Alicante. Perteneciente a la joven generación, posee ya un abundante trabajo en teatro y ha participado en televisión y cine. Algo que resalta como virtud de este montaje, amén de lo ya dicho es que

• ha ido a buscar a la nueva generación, a los actores de la nueva cantera, a escuelas de arte dramático de Madrid, Valladolid y Sevilla. De esta forma a los jóvenes actores nos ha dado la posibilidad de estar en este espectáculo de estas dimensiones. Un sueño para los estudiantes de arte dramático que están terminando o han terminado. Es un  ejemplo a seguir para el resto de directores de nuestro país. Me siento totalmente agradecida, tanto yo como el resto de mis compañeros.

Blanca la describe como una  actriz

• con unas facultades actorales espléndidas y una entrega, generosidad y luz para hacer esa Inés, que es lo opuesto a la tonta. Es la pura vida. La inocencia siempre se entiende como algo de tonta "no entiendo nada, no sé". Cuando recuerdo a mi sobrino, no tengo hijos, palpo la vehemencia con la que se defienden cosas que cinco minutos después defiende la opuesta. Cuando dices "es que el amor es... " o ves a los adolescentes decir:"Nunca más volveré a hacer esto" Eso es para mí la inocencia.  Es pura pasión sin control. Tengo un plantel de actores que me los quedaba para siempre.

BRÍGIDA: UNA GRAN MANEJADORA

BEATRIZ ARGÜELLO FOTO: CEFERINO LÓPEZ

Otro de los personajes destacables es Brígida que muestra una mezcla de simpatía cómica y malicia. La interpreta Beatriz Argueyo.

• Esa simpatía y malicia es el barniz que hemos quitado. En las acciones y no sólo en las palabras. Nos olvidamos que Brígida trabaja para el padre de Doña Inés. Él la ha contratado para que vaya al convento y la aleccione, ocultándole a la Abadesa que la va a casar. Está cobrando un sueldo, y a espaladas del padre de Inés se contrata con Juan y le ayuda a secuestrar a una niña. Hay que verlo como una noticia de un periódico:"Una mujer encargada de cuidar a una niña, por lo que cobraba un buen sueldo, ayuda a un delincuente a raptar a la adolescente para ser violada en su casa" ¿Dónde está la simpatía? No le veo ni puta gracia. Hay una persona que, deliberadamente, comete un delito terrible: poner en peligro la vida de una adolescente. Miente, engaña y que es una gran manejadora. Representa lo que se nos ha dicho durante siglos. En cada situación compórtate como debes. Cuando haya que ser tonta, sé tonta; cuando hay que ser lista, sé lista; cuando haya que llorar, llora; cuando haya que ser ama de casa, sé ama de casa; cuando haya que ser puta, sé puta... Brígida sabe lo que tiene que hacer en cada momento ante los hombres y la sociedad que le rodea. Esa es mi Brígida. Beatriz Argüello, que está más buena que el pan, es joven, está en un momento pletórico de su vida ,entre los cuarenta y los cincuenta, que domina y controla su ser. En el momento adecuado pagará las consecuencias de sus actos. en esta función "el que la hace la paga". La vida te pasa factura. 

Más información    Don Juan Tenorio. Zorrilla. Portillo. Mayorga     Don Juan Tenorio. Portillo. Crítica José Ramón Díaz Sande Copyright©diazsande