San Francisco. Messiaen. Opera. 2011. Entrevista Imprimir
Escrito por José R. Díaz Sande   
Viernes, 08 de Julio de 2011 14:38

SAN FRANCISCO DE ASÍS

MÚSICA QUE TRANSFORMA A LA GENTE

 

FOTO: JAVIER DEL REAL

 

Primero se presentó la instalación de la Cúpula en el Madrid Arena - Casa de Campo de Madrid -, la cual venía ligada a un título operístico: San Francisco de Asís. De esta ópera “sui generis”, se aireó su larga duración: De 18 horas a 24 horas. En realidad la ópera en sí misma son 4 horas y 15 minutos. El resto son intermedios. Ante un posible reproche de extensión el propio compositor y autor del libreto, Olivier Messiaen (1908 – 1992) reconoce:

 

·         Es cierto que mi ópera es muy larga. Las de Wagner también, y a nadie se le ocurre reprochárselo. Si el tema lo justifica, no veo ningún motivo para no escribir una obra larga… Pero a Saint François no sólo se le ha reprochado su duración. Algunos críticos han pretendido que es más un oratorio que una ópera. Es verdad que no se trata de una ópera tradicional, pero tampoco es un oratorio. Es un espectáculo musical en el que los movimientos de los personajes, el vestuario son necesario. Pero como ya hemos dicho, la orquesta también es un personaje de la ópera, e incluso su personaje principal.

 

OLIVIER NIÑO: PARTITURAS COMO REGALO

 

 
 OLIVIER MESSIAEN

Olivier, musicalmente, fue un niño fuera de lo común. Él mismo narra sus inicios:

 

·         Cuando era un niño de entre siete y nueve años, en Grenoble, aprendí a tocar el piano yo solo, e incluso empecé a componer. Como todos los niños, cada año esperaba la Navidad, que me traía regalos. Pero esos regalos, cuya lista escribía de antemano, no eran juguetes, ni siquiera cuadernos para colorear o libros: eran partituras musicales. (…) Cuando cumplí diez años, Jehan de Gibon, mi profesor de armonía en Nantes, me regaló una partitura de Pelléas et Mélisande. Fue una auténtica bomba puesta en manos de un niño chico por un profesor de provincias. Esa partitura fue para mí una revelación, un flechazo: la he cantado, tocado y vuelto a cantar indefinidamente. Probablemente fuera la influencia más decisiva que recibí.

 

SAN FRANCISCO ABRE LA ERA MORTIER

 

Con este San Francisco se abre la programación de la era Gerard Mortier, el cual siente adoración por la obra musical y su compositor. Curiosamente hay algo más que les une: Pelléas et Melisante. Olivier la ha cantado y tocado una y otra vez; Mortier la ha incluido en su programación.

 

·         El principio de la temporada 2010-2011, se abría con la ópera Ascensión y Caída de la ciudad de Mahagony - CLIKEAR -, San Francisco es la oposición a una dramaturgia convencional de ópera – declara Gerard Mortier. Sin embargo para nuestro mundo occidental es una ópera y una ópera para hoy, que, como otras, tiene un lugar de excepción por su inventiva musical y porque dramatúrgicamente responden a las aspiraciones y cuestiones de su época. Ahí está el Fidelio de Beethoven, cuya trompeta revela liberación en vez de poder. O bien el cromatismo del tema inicial y el uso de la tonalidad en Tristán e Isolda de Wagner, que dejan patente el laberinto del amor en Occidente.  El San Francisco de Olivier es música que transforma a la gente. Cuando se entra en el espectáculo y se abre el corazón, uno queda transformado con nuevas energías al salir. Cambiamos.

 
 SYLAVAIN CAMBRELING
FOTO: MARCO BORGGREVE

Sylvain Cambreling – actualmente director musical de la SWR Sinfonierorchester Baden-Baden, Freiburg (Orquesta Sinfónica de la Radio de Baden-Baden-Friburgo) – dirige la orquesta, que en este caso no es la del Real sino de la cual es director actual. Para él:

 

·         La música de Messiaen es muy particular. Utiliza técnicas nuevas como son lo atonal, lo dodecafónico como lo hicieron Shonemberg, Stravinsky, pero en vez de quedarse en ello, sigue una línea francesa como es Debussy, Berlioz, Rameaux… Comenzó en los años 20 y ha recorrido todo el siglo XX hasta su muerte en 1992. Ha escrito siempre música orquestal tanto para pequeños conjuntos como grandes, pero nunca una ópera, pues no se sentía capaz. Tuvo que pasar mucho tiempo, hasta que le convenció Rod Lilebermann, el  director de la Ópera de París.

 

UN PERSONAJE SEMEJANTE A CRISTO

 

Olivier Messiaen es un ferviente y sincero católico, por eso, declara:

 

·         Mi sueño era escribir una Pasión, o una Resurrección de Cristo. Pero pensé que no era digno de hacerlo, y sobre todo que no era representable en un escenario. Producir una Pasión o una Resurrección en un gran escenario de ópera me parecía condenado a caer o en el ridículo o en la inconveniencia. He optado por un personaje que, no siendo un dios, sino tan sólo un hombre, sin embargo se parecía a Cristo porque era casto, porque era humilde, porque era pobre y porque sufrió (...) atrozmente el hambre, la sed, las inclemencias, y sobre todo sufrió atrozmente los estigmas (...) Al final de su vida, San Francisco ya ni siquiera podía andar de lo mucho que le dolían los pies, y su manos ensangrentadas le impedían agarrar objeto alguno. Era un verdadero suplicio.

 

 
 FOTO: JAVIER DEL REAL

En la controversia opera/oratorio, ya Messiaen lo dejó claro en su tiempo:

 

·         Está muy lejos de ser una ópera mozartiana o de la ópera wagneriana. Digamos que es un espectáculo musical. pero tiene un coro, como en Boris (Goudonov) como en el teatro  Nô japonés, como en el teatro griego antiguo. Un coro que desempeña el papel de un comentador y que como una especie de voz divina interviene constantemente.

 

Despejado el posible equívoco, Messiaen insiste:

 

·         He creado un “espectáculo musical” – e insisto en ese término. No me gustaría que se interpretara Saint François en versión de concierto, pues se trata realmente de un espectáculo.

 

MÚSICA MARCADA POR LA ALEGRÍA

 

FOTO. JAVIER DEL REAL

 

Sylvain Cambreling, conocedor a fondo de la partitura corrobora las palabras de Messiaen:

 

·         Es una verdadera ópera y no un oratorio, pues hay verdaderamente personajes. Lo que no contamos es una historia sino la existencia de San Francisco en cuanto “la evolución de la gracia en el alma de un santo”, según las palabras de Messiaen.

 

Con respecto a la música, Sylvain la ve como:

 

·         La suma de todo lo que Messiaen hizo musicalmente en su vida. Uno de los parámetros importantes es el canto de los pájaros, tema central en la vida de San Francisco, y para ello grabó cientos de cantos de pájaros y poder así hacer después la anotación musical. Francisco hablaba con los pájaros y es lógico que aparezcan en la obra musicalmente. Recurre a instrumentos de vientos: flauta, oboe, clarinete, pero conjuntados en armonía de modo que comuniquen libertad y alegría como pájaros en el bosque, pero no tristeza. En general la música en San Francisco, es música de alegría.

 

Junto a este desarrollo melódico, marcado por la “alegría” se unen

 

·         Otras melodías de corte más tradicional como es el gregoriano y algo muy especial: una música que trasciende lo puramente auditivo y que produce una gran alegría, calma y de carácter meditativo. Con todo esto se queda el público que lo escucha por primera vez. La obra muestra una confianza en el género humano y la comunica. A lo largo de toda la obra se muestra el amor al hombre y transmite una gran energía.

 

Se ha acusado  a la obra de ser larga.

 

·         Son cuatro horas y media de música – reconoce Sylvain -, pero transmite una gran fuerza y aunque es larga, yo, como director  no salgo cansado de ella. Sólo al día siguiente siento el cansancio. San Francisco es el mayor regalo que se puede hacer al público.

 

DIOS TRAS UNA CÚPULA DE CAMBIANTE COLORIDO

 

FOTO: JAVIER DEL REAL

Messiane ha compuesto la música y redactado el texto, porque

 

·         mi música presenta una gran complejidad rítmica, y necesito palabras que se adapten  a mis ritmos. Eso significa que me guardo la posibilidad de modificar de modificar una palabra en función de una necesidad rítmica. Por otra parte, amo a los cantantes, y no tengo ningunas ganas de hacerles silbar o hipar. Los cantantes necesitan vocales abiertas y graves, y sobre todo en los agudos.

 

Música, texto y también…

 

·         Hubiera querido definir yo mismo la puesta en escena, pero comprendí que es un oficio para el que no estoy capacitado, y que por tanto sería incapaz de resolver sus dificultades prácticas.

 

El tema de San Francisco revoloteó en la mente de Messiane, durante 30 años, aunque nunca creyó que fuera una realidad. Tras la propuesta redactó el texto en meses “mientras que tardé cuatro años en componer la música y cuatro años en orquestarla y en reescribir la partitura de la orquesta”declara Messaine.

 

DE 1983 A 2011.

 

EMILIA KABAKOVA  /  ILYA KABAKOVA
FOTO: ROMAN MENSING

El estreno llegó el 28 de noviembre de 1983 con dirección de Seiji Ozawa, puesta en escena de Sandro Sequi y decorados y vestuario de Giuseppe Crisolini-Malatesta. Si hacemos caso al texto original Messaine sitúa los diferentes cuadros, en diversos espacios: un camino, una sala baja de lazareto, una ventana, el Monte Verna etc… El estreno fue en vida de Messiane. Después vinieron tres versiones más de la mano de Gerard Mortier, enamorado y obsesionado este San Francisco: Salzburgo (1994), París, y  la de Ruhry. Será en esta cuarta versión cuando se concibe una nueva escenografía: una gran cúpula, creada por Emilia Kabakova e Ilya Kabakov.

 

·         Nos preguntan si somos religiosos por la creación de la Cúpula – declara Emilia. No lo hicimos por eso. Al ver el libreto tuvimos que aprender más del autor y escuchar la música que es difícil al principio. Poco sabíamos de la música clásica o contemporánea de Messiane. Es una ópera larga y no ocurren muchas cosas. Teníamos, pues, que situarla y de ahí la concepción de la Cúpula. Yo, como artista, vi la diferencia que había ente oír y escuchar. La tuve que escuchar 8 veces y comprendí lo que hay dentro: los pájaros y más cosas. Un músico lo encontraría pronto, nosotros un poco más pues nos cuesta.

  

La Cúpula, vista desde el interior y con posibilidad de cambiar de color, según Emilia, puede tener diversas lecturas simbólicas:

 

·         La primera conecta con el hombre muy religioso y representa la cumbre espiritual. La segunda es la iluminación del alma. La tercera es la evocación de la conciencia desde la cultura, que es la cimbre de nosotros como seres humanos y religiosos que puede formar parte de la honradez y la cultura que es lo que cambia al ser humano.

 

La Cúpula remite a los rosetones y lucernarios de las iglesias.

 

·         Las iglesias con la cúpula en el centro – añade Emilia -, concentra las oraciones, los pensamientos de los fieles que a través del lucernario se elevan a Dios. En ese lucernario radica la iluminación, donde se concentran los pensamientos y deseos de un mundo mejor como el de San Francisco que sube hacia la luz de la Cúpula. La diversidad de los muchos colores que se suceden es por estar relacionados con la música y que tienen que ver con la historia de la música rusa, por ejemplo Stravinski, compone una música que está relacionada con colores. No sabemos si lo hemos conseguido. Esperamos que sí y que el público disfrute de esta obra.

 

LA DIRECCIÓN ESCÉNICA: RESPETO A LA MÚSICA, HORIZONTALIDAD Y VERTICALIDAD.  

 

Giuseppe Frigeni es el director de escena de una ópera de poca acción.

 

·         Mi primera preocupación – desvela Giuseppe -, al trabajar con esta escenografía, fue el respeto a la música, porque creo que siempre es lo más importante. La música me proporciona las texturas que necesito para poder crear la dramaturgia. Comencé en Friburgo con Cambreling. Empleamos dos días estudiando la música página a página. Me descubrió los pequeños elementos y los “leivmotive”, que me proporcionaron la estructura.

 

Según Yvan Nommick, musicólogo y Director de Estudios Artísticos de la Casa de Velázquez,

 

·         La utilización de diferentes Leitmotive es un potente factor de unidad en esta ópera, pero no son meros motivos recurrentes, pues se transforman en función de la evolución del drama. Messiaen escribe perfectamente este procedimiento en el tercer tomo de su Tratado de ritmo, color y ornitología: “El Leitmotiv cambia, como los casos de una declinación y como las iluminaciones de los objetos y de los personajes de la naturaleza. Su sitio y su transformación indican un recuerdo, una presencia, una profecía, etc. ¡Es un lenguaje comunicable! Se basa en una convención sonora, como todos los lenguajes, crea el objeto designado, como las palabras primitivas”. Wagner llevó la utilización del Leitmotiv a un gran nivel de perfección, y Messiaen desarrolló el procedimiento de Wagner, pues dotó a cada personaje no sólo de uno o varios motivos, sino también de uno  o varios cantos de pájaro.

 

GIUSEPPE FRIGENI

Otro de los elementos que interfirieron en la dirección escénica de Giuseppe ha sido la instalación que califica de

 

·         Muy profunda. Tras respetar la música la simplicidad estaba clara. San Francisco es un ejemplo de simplicidad y humildad y por ello no había que meter nada que lo obstaculice. La vida de San Francisco es un camino hacia la perfección. Es un camino espiritual. Hay dos aspectos a considerar la horizontalidad espacial que es muy amplia y es la tierra. Después está la verticalidad, representada en la cúpula que es la aspiración hacia la luz. Con estas dos líneas y la simplicidad es lo que se está más cerca de la música.

 

El otro problema a resolver era el evitar el Oratorio, tema que apareció desde el inicio, y que Messiaen insistió en que no lo era. Giuseppe Frigeni no lo ve como Oratorio:

 

·         Como ha dicho Cambreling, tiene personajes que evolucionan. El hermano León comienza manifestando miedo y después evoluciona. Cada monje está trazado con su propia identidad. Había que expresar y desvelar sus actitudes a lo largo de la obra. No se podía ser completamente abstracto, ni naturalista, puesto que en la música hay elementos abstractos y descriptivos. Hay gestos que se repiten a través de los “leitmotive”, que caracterizan a cada situación o personaje. Se juega con una amplitud del espacio, en la parte horizontal, que el espectador no puede abarcar de un solo golpe, y por ello tiene que barrer. Los personajes están separados horizontalmente y el espectador tiene que ir de un lado al otro con la cabeza. La Cúpula, en el centro, supone la elevación vertical. No quería concentrar toda la acción en ese centro. Con la puesta en escena evoco la pintura bizantina, en la que los personajes se sitúan en diversos lugares como en los Ikonos. Aquí la música es la que va descubriendo los diversos personajes. A veces los tiempos se superponen como en las pinturas de Masaccio. El elemento de simplicidad era muy importante, para que se pudiera leer la acción con la música.

 

SAN FRANCISCO, UN PAPEL ENORME, GIGANTESCO

 

A San Francisco lo interpretan el barítono Alejandro Marco-Buhrmester, que ha participado en le Tristán e Isolda del Teatro Real, y el bajo-barítono Vincent Le Texier, el cual ya cantó en el Teatro Real Vec Malropulos.

 

Gerard Mortier conoció a Alejandro Marco-Buhrmester cantando Parsifal.

 

·         Al escucharlo vi que era el San Francisco, pero no solamente por su voz, sino por su inteligencia y sabiduría, pues interpretar al santo es difícil.

 

ALEJANDRO MARCO-BUHRMESTER
FOTO: JAVIER DEL REAL

Alejandro Marco-Buhrmester, nació y se educó en Suiza. Se define como:

 

·         Medio alemán y medio español, aunque mi lengua madre es el alemán. Mortier me llamó para ese papel y mi primera reacción fue: “No, soy demasiado joven para ese papel.” Es un papel enorme, gigantesco. A ello se añade, a nivel personal, el que yo que no domino el francés, me he tenido que aprender un montón de palabras. Son 4 horas y media y casi cuatro horas estoy en escena Y me siento como un computador (ordenador) que no funciona bien, pues me falta memoria Ram,  pero va adelante. Ahora me gusta mucho este papel y personalizar este personaje.

 

San Francisco y su mundo poseen una referencia claramente religiosa, por el personaje y por la religiosidad de Olivier Messiane. En varias ocasiones Alejandro Marco ha sido interrogado a este respecto:

 

·         Me preguntan si hay que ser creyente para interpretarlo. Si se es creyente ayuda, pero no es necesario. Es lo mismo que si hago de Yago, no me convierto en asesino o en el caso de Carmen, cuando interpreto al Torero. Yo, personalmente odio a los toros y los toreros, como toreros, pero lo puedo cantar. Aquí lo mismo. Se trata de entrar en el papel y me da mucho gusto el hacerlo.

 

UNA EXPOSICIÓN COMPLETA LA FIGURA DE OLIVIER MESSAIAEN

 

En torno a la ópera Yvan Nommick ha montado una exposición que se puede visitar durante los intermedios.

 

·         Tiene que ver con el conjunto – declara Yvan. Están las primeras obras editadas de 1928/29 como son los preludios. Hay compositores que encuentran su lenguaje musical y evolucionan como es el caso de Messiaen y de otros como Stravinsky, Manuel de Falla. De estos último se trata de evoluciones radicales. En el caso de Messiaen no es así, sino que su lenguaje se enriquece a los largo de sus 60 años.

 

En la exposición se tratan grandes temáticas y está dividida en cuatro partes.

 

·         La primera se puede llamar Teología sonora, que expresa la fe de Messiaen.

·         La segunda se refiere a la naturaleza como puente de sensibilidad. No se inspira en los pájaros, pues es algo más profundo. Desde su niñez Messiaen y ya con un año, en la cuna, se quedaba embelesado con el canto de los pájaros. Los pájaros y la naturaleza son su hábitat.

·         La tercera se refiere a Oriente y Occidente como ida y vuelta. La música de Messiaen tiene una gran inspiración en la música de Oriente y por ello Debussy que es importante en la música francesa. Pero no solamente por su colorido sonoro, sino por el aspecto espiritual. Messiaen es un músico católico, pero con San Francisco va más allá. Supera lo católico y el misticismo. Llega a lo contemplativo y esto es lo que admiraba en Oriente, que estaba más cerca de lo espiritual que Occidente. Pero es un ida y vuelta, pues su obra y espiritualidad influyó en los compositores orientales.

·         La cuarta es su propia ópera como fuente de inspiración

 

·         Es una exposición sencilla. No hay documentos originales, pero sí reproducciones. Se puede visitar en una media hora. Es un diseño elegante de Rodríguez Fernández y con tarjetas informativas de fácil y clara lectura. Con todo ello el espectador puede empaparse de la esencia de Messiaen.

 

EL CANTO DE LOS PÁJAROS: ELEVARSE A LAS ALTURAS

 

FOTO: JAVIER DEL REAL

San Francisco es una figura que está en contacto con la naturaleza y goza con ello. En esa naturaleza está el mundo de los pájaros, con los que se dice que conversaba. La música de Messiaen cuenta con esos sonidos. En declaraciones a El País según Mortier:

 

·         Cuando utiliza la belleza del canto de los pájaros, nos obliga a superarnos a nosotros mismos. Nos eleva a alturas desconocidas y nos llena de nuevas energías. No todos entenderán este mensaje, pero quien se entregue con toda su alma a este torrente de música, sentirá que renace. Esa es la magia de algunas partituras como La flauta mágica, Fidelio, Tristán e Isolda. Cuando se las escucha, se ve el mundo de una manera diferente. 

 

Para Mortier, San Francisco contrasta con el mundo occidental actual.

 

·         En nuestro mundo la moda llena páginas de periódicos mientras los jóvenes no tienen trabajo ni futuro. Los grandes deportistas duplican sus ya cuantiosos ingresos como modelos de campañas publicitarias de ropa interior. El 13 % de la población no tiene agua potable. Europa mantiene las ideas de la Revolución Francesa en teoría, pero cierra las fronteras a los que huyen de las dictaduras. Nuestro mundo ha olvidado los valores. San Francisco nos propone que sería bueno alejarnos de nuestras ciudades, coches, móviles… y que fuéramos hacia la naturaleza, observáramos el vuelo libre de los pájaros y nos acercáramos a los que necesitan ayuda. Olivier ha compuesto una partitura como una catedral. En este siglo XXI necesitamos meditar viendo el atardecer, escuchar a los pájaros mañaneros, contemplar la monumentalidad de los océanos y las montañas. De este modo podremos tener una visión de futuro para que la Tierra sea de todos.

 

 


José Ramón Díaz Sande
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Última actualización el Jueves, 21 de Julio de 2011 11:09