Calipso Imprimir
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Sábado, 06 de Marzo de 2010 18:27

CALIPSO
o CALIPSO Y LOS HOMBRES
en el TEATRO MADRID

[2006-11-08]

Del 17 de noviembre
al 10 de diciembre de 2006

 



DISEÑO: CARLOS MANUEL DÍAZ

CALIPSO
o
CALIPSO Y LOS HOMBRES
en el
TEATRO MADRID

nueva versión
por
PEDRO VÍLLORA/MONTSERRAT FONT
de

EL JOVEN TELÉMACO
EUSEBIO BLASCO/JOSE ROGEL


Del 17 de noviembre
al 10 de diciembre
De 2006

140 AÑOS DESPUÉS DE SU ESTRENO,
SIGUE SIENDO UN JUGUETE CÓMICO
QUE NO HA PERDIDO SU FRESCURA Y ENERGÍA.
 

 El 23(22) de septiembre de 1866 se levanta el telón en el Teatro Variedades – Teatro de los Bufos Madrileños - de Madrid para estrenar El joven Telémaco. Su autor era un joven de veintidós años, Eusebio Blasco (Zaragoza, 28 – IV- 1844/ Madrid 25-II – 1903) y el compositor José Rogel (Orihuela(Alicante) 24 – XII – 1829/ Cartagena 26 – I – 1901).

El 17 de diciembre de 2006 se volverá a levantar el telón para El Joven Telémaco en el Teatro Madrid, que ahora se presenta bajo el título Calipso en una versión de Pedro Víllora. Este espectáculo inauguró el Festival de Teatro Clásico de Mérida de 2006.

FRANCISCO ARDERIUS

El director de escena Ángel Roger propuso a Pedro el resucitar este texto, quien declara:

  • El joven Telémaco depende más de Fenelón que de Homero. Eusebio Blasco lo había escrito por encargo de Francisco Arderius, actor y empresario que había conocido en París el éxito de las operetas de Offenbach: La bella Helena, Orfeo en los Infiernos etc.
PEDRO VÍLLORA

EUSEBIO BLASCO

Aquellas operetas abordaban los temas clásicos, sin pretender su historicidad ni un elevado valor literario. Los ingredientes comunes a este tipo de espectáculos, eran una música pegadiza, comicidad de alto voltaje picaresco fusionada con elementos grotescos. Se recurría a menudo a la sátira política. Y todo ello se sazonaba con chicas descaradas de relucientes pantorrillas.
 


ANGEL ROGER
  • Este tipo de teatro musical fue un intento de crear en nuestro país un género nuevo – aclara Angel Roger. El modelo del teatro bufo es el de una obra breve, de argumento siempre descabellado e impredecible, que tiende a la caricatura y se mofa de todo tipo de grandes temas como los mitos históricos, la realeza, el ejército, la política, etc. Para ello recurre a música agradable y ligera; sensuales habaneras, tangos, floreadas seguidillas, y todo con aire de exotismo. Aún no había nacido el género chico y la ligereza de estos espectáculos tuvo una gran aceptación popular. Es en esencia el comienzo de un género que derivó con el tiempo en espectáculos de variedades y en la revista propiamente dicha.

EL JOVEN TELÉMACO ALDABONAZO
PARA LOS PURISTAS
DE LA ZARZUELA


Lógicamente para los puristas de la zarzuela grande, aquello era una profanación. Incluso cuando se recuerdan “los bufos” en la literatura de zarzuela no se es muy misericordioso con ellos. En el Madrid Cultural de 1992, se resucitó alguno de ellos: Robinson y lo más llamativo era el contraste de la música – de cierta altura – y los argumentos baladíes.

Frente a los detractores del nuevo género, surgían, en opinión de Ángel, defensores como:

  • Don Benito Pérez Galdós quien escribió un interesante artículo en el diario La Nación a favor del teatro popular de Los Bufos de Francisco Arderius, desmarcándose de los escrúpulos artísticos y estéticos de la mayoría.
En la sociedad de la época sucedió algo parecido a lo que hoy sucede con los programas del corazón que nadie los ve, pero son muchos los que conocen las noticias.
  • A pesar de las críticas – recuerda Ángel -, por el hecho de imitar el modelo francés y por la ligereza y la futilidad del divertimento, lo cierto es que todo el mundo canturreaba las canciones de Los Bufos. Un país que latía ya a ritmo prerrevolucionario, cuando en 1868 se instauraba la 1ª Republica. El propio Valle-Inclán lo refleja en su esperpento Viva mi dueño: poniendo en boca de uno de sus personajes el ¡Me gustan todas, me gustan todas, en general! parafraseando la chistosa y eficaz habanera de El joven Telémaco.

EL JOVEN TELÉMACO ABRE NUEVAS VÍAS
Y DESCUBRE A LAS
SURIPANTAS

 


FOTO: SERGIO PARRA
El joven Telémaco iniciaba, en España, esta experiencia en 1866. Ese mismo año en Nueva York se estrenó The Black Crook que junto al estreno en Inglaterra de El Mikado de Gilbert & Sullivan un año antes y La Bella Helena de Offenbach en el París 1864 son considerados el nacimiento de este nuevo teatro musical. Nombre que no se le había dado ni a la ópera ni a la zarzuela.

Llegó a tener 33 representaciones seguidas y setenta y dos, durante la temporada. Llegó hasta los teatros privados como en el de la condesa de Montijo. Allí acudieron la infanta Isabel y su hija, los ministros de Brasil y de Estados Unidos y la aristocracia, que no dudó en interpretar algunos de los papeles.

Posteriormente el 17 de febrero de 1900 subía al Teatro de la Zarzuela, pero con una revisión del propio Eusebio Blasco. Lo había aligerado y dejado en un solo acto.
 

Con los bufos se popularizo el término de las “suripantas” a las cuales Arderius anunciaba como “primeras tiples relativas”. El público les perdonaba su voz o su afinación porque estas limitaciones se compensaban con las 24 estupendas piernas correspondientes a 12 “suripantas”. Las tales eran unas sensuales señoritas sobre la escena. Según afirma Eusebio Blasco, algunas de estas “suripantas”, casaron con nobles o altos cargos del gobierno. El apelativo de “suripantas”, hoy olvidado, pasó a denominar a las coristas y posteriormente a las mujeres del teatro.
 

LOS BUFOS CASADOS CON LA
ACTUALIDAD SOCIOPOLÍTICA


Uno de los elementos importantes es la alusión a la actualidad sociopolítica y hoy estamos en el 2006.

  • La alusión a la actualidad más inmediata y reconocible era fundamental. – concluye Pedro Víllora. Mi principal problema fue, cómo mantener cómo mantener una comicidad basada en argumentos de la época desconocidos para el público de hoy. Había que conservar el espíritu burlesco del original, aunque para ello fuese necesario cambiar la letra.

Los cambios comenzaron por utilizar un lenguaje para los dioses y otro para los humanos.
 

  • Los dioses hablan en verso y los humanos en prosa. También he intentado privilegiar el mundo femenino representado por las diosas y las ninfas, aumentando el protagonismo de la diosa Calipso así como de ese ser de sexualidad compleja que es el sabio Mentor. El resultado es algo más que una simple versión pero menos que una obra propia. Viene a ser una paráfrasis, siguiendo a León Felipe cuando define así su recreación de Macbeth llamada El asesino del sueño.

FOTO: SERGIO PARRA

Tales acentuaciones han llevado a cambiar el título.
 


FRANCISCO VALLADARES
FOTO: SERGIO PARRA
  • El título puede ser Calipso o Calipso y los hombres. Con ello se resalta el triunfo de las mujeres que luchan por sus deseos frente a los hombres que son movidos por el capricho o por el interés, que también es masculino el bien pagado dios Amor. He, pues, intentado privilegiar el mundo femenino representado por las diosas y las ninfas, aumentando el protagonismo de la diosa Calipso así como de ese ser de sexualidad compleja que es el sabio Mentor.

La partitura de José Rogel, ha sido revisada por Montserrat Font Marco:

  • Montserrat ha trufado nuevos números musicales del mismo compositor – advierte Ángel -, para adaptar el conjunto de la obra a las decisiones de la dirección de escena.
MONSERRAT FONT             2006  

1866                     JOSÉ ROGEL

Helena Sánchez Kriúkova nos introduce con su colorista vestuario en un mágico mundo clásico aderezado con guiños burlescos de otras cronologías.

Felipe Rodríguez de Lima ha diseñado el espacio escénico, un mar Egeo imaginario, genérico y significante, con unas olas juguetonas que protegen o amenazan a nuestros protagonistas.

Juan Gómez Cornejo desde su maestría, ha inventado una luz que se inspira en las gamas acuáticas, creando un sugerente mundo casi submarino que nos genera percepciones nuevas.

Marta Gómez ha creado una dinámica y guasona coreografía con ecos de las follies,de los scandals,de las variedades de antaño.
 

SINOPSIS ARGUMENTAL


 

ACTO I

La diosa Calipso se encuentra furiosa y desairada en su cueva porque su amante, Ulises, ha desaparecido. Telémaco, hijo de Ulises, que se ha puesto en camino en busca de su padre, llega a la isla de Calipso acompañado de su preceptor, Mentor. Calipso se enamora de Telémaco nada más verle, por el gran parecido que tiene con su padre, y hace lo imposible por conquistarle. Telémaco, consciente de los encantos de la diosa, se prenda de la ninfa Eucaris, que a su vez le corresponde; ésta es encerrada en una cueva por Calipso. Mentor se da cuenta de las artimañas de Calipso y trata de proteger al joven, huyendo ambos.

ACTO II

Calipso visita a la diosa Venus, madre de Eros, dios del amor, y suplica a éste que haga regresar a Telémaco a sus brazos. Eros trae a la isla a Telémaco y Mentor, considerando así cumplida su misión. Pero Telémaco soborna al joven dios con dinero de Mentor y le pide que vaya buscar a la ninfa de la que se ha enamorado. Llega Ulises a la isla, con la cara tapada, sin ser reconocido por Venus. Ulises y su hijo se encuentran y, tras reconocerse, se abrazan con amor. La obra concluye felizmente, con la llegada de Eucaris, traída por Eros, la cual se une a Telémaco. Calipso decide casarse con Mentor, el único que le ha dado consejos adecuados, pero no puede hacerlo, pues Mentor era en realidad la diosa Minerva, disfrazada de hombre para proteger al joven Telémaco.


Con esta producción, la Compañía Lírica Dolores Marco inauguró el Festival de Teatro Clásico de Mérida del 2006, con un rotundo éxito de público y crítica. Se trata de un musical distinto, una nueva forma de presentar la zarzuela. Actual, ágil y colorista, Calipso está pensado para atraer al público joven, sin olvidar a los fieles seguidores del género lírico.

En escena 17 cantantes y actores, una orquesta en directo de 33 profesores, una cabecera de primera línea y un equipo técnico de profesionales al servicio de una puesta en escena impactante, componen esta compañía de más de 60 personas.

FUNCIONES
Martes, miércoles y jueves: 20:00 HORAS
Viernes y sábados: 19:00 y 22:00 HORAS
Domingos: 18:00 HORAS


Título: Calipso (Basado en El Joven Telémaco)
Autor: Eusebio Blasco
Adaptación: Pedro Víllora
Música: José Rogel
Arreglos musicales: Montserrat Font Marco
Escenografía: Felipe Rodríguez de Lima
Iluminación: Juan Gómez Cornejo
Coreografía: Marta Gómez
Vestuario: Helena Sánchez Kriúkova
Foto y diseño de cartel: Carlos Manuel Díaz
Fotos: Sergio Parra
Compañía: Compañía Lírica Dolores Marco
Producción: Mª Dolores Font en coproducción con el Festival de Teatro Clásico de Mérida
Orquesta: ORQUESTA TITULAR DE LA COMPAÑÍA DOLORES MARCO
Intérpretes: Francisco Valladares (Mentor), Soledad Mallol (Calipso) y Elena Martín (Eucaris) (Las Virtudes), Marco Moncloa (Telémaco), Tonino (Dios Amor), Susana Casas (Venus), Carlos Manuel Díaz (Ulises), Emilio Cerdá (El Ninfa Nisco), Isabel Rodes (La Ninfa Leucotoe), Eduardo Cárcamo (Ninfa)
Ninfas: María Arcos, Mónica Domínguez,
Sandra Jiménez, Rebeca Matellán, Cristina Palomo,
Andrea Soto, Lorena Toré Vallecillo.

Dirección musical: Montserrat Font Marco.
Dirección escénica: Ángel Roger
Duración: 50 ‘ (1ªparte) / 40’ (2ª parte).

FOTO: SERGIO PARRA
 

Teatro Madrid
Director: José Manuel Garrido
Avda. de la Ilustración, s/n
Parque de La Vaguada.-
28029 Madrid
Teléfonos: 91 740 52 74 / 92
Metro: Barrio del Pilar y Herrera Oria, línea 9
Bus: 67, 83, 124, 128, 130, 147, N9
www.entradas.com 902 488 488
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Última actualización el Jueves, 06 de Mayo de 2010 17:09