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Rienzi. Wagner. Concierto. T. Real. Entrevista PDF Imprimir E-mail
Escrito por José R. Díaz Sande   
Sábado, 19 de Mayo de 2012 14:41

RIENZI

APERITIVO EN EL BICENTENARIO

DE RICHAR WAGNER

 

 
 FOTO: TEATRO REAL


En el 2013 se celebra el bicentenario de Wilhelm Richard Wagner -
Leipzig, Reino de Sajonia, Confederación del Rin, 22 de mayo de 1813 / Venecia, Reino de Italia, 13 de febrero de 1883 -, y a partir de ese años Wagner estará muy presente en el Teatro Real de Madrid. Rienzi es un aperitivo, o expresado más musicalmente el "preludio" de esa conmemoración.

 

Trece solistas, Cien cantantes entre los dos coros - Chor de Viena y Coro Titular del Teatro Real - y 122 músicos de la Orquesta Titular del Teatro Real, repartidos en el foso y la escena. 

 

RIENZI, EL ACONTECIMIENTO MÁS IMPORTANTE

 

Rienzi es ópera a la que no se acude con frecuencia. Vistos los números de participantes, se puede explicar una de las causas de su ausencia, amén de otras. El Teatro Real lo ofrece en versión de concierto. Para Gerard Mortier, director artístico del Teatro Real de Madrid:

 

·         Esta representación en Madrid es el acontecimiento más importante. En este mismo año se celebra el bicentenario del nacimiento de Verdi - La Roncole, Busseto, 10 de octubre de 1813 / Milán, 27 de enero de 1901 -, decidimos no acudir a Wagner ni a Verdi, salvo el Parsifal y el Macbeth, en este 2013, en el año Wagner, pues no tenemos cantantes, ya que se celebra en todo el mundo. Lo más interesante  ha sido crear iniciativas sobre este compositor. Hemos empezado con el discutido Choeurs (CLIKEAR) que abrazaba Coros de Wagner y de Verdi y que irá en gira durante 2 años. Ahora vamos con Rienzi.

 

Rienzi es la tercera ópera de Wagner y se basa en la novela de Bulwer-Lytton: Rienzi, the last of the Roman Tribunes.

 

RIENZI

 

UN PARTO COMPLICADO

 

Rienzi como ópera tuvo un parto un tanto complicado y variado. En 1838, en la pequeña ciudad de Riga (Imperio Ruso, actualmente capital de Letonia), Wagner compuso los dos primeros actos. Tenía 24 años. En esa ciudad era director musical del Teatro Municipal de dicha ciudad, pero asediado por las deudas - algo común durante toda su vida, en 1939 - abandonó Riga furtivamente para burlar a sus acreedores y recaló en Francia.

 

En 1839 y 1840, entre Boulogne-sur-mer y París, compuso los tres últimos actos. Meyerbeer insistió en que se estrenara en Berlín y luego en París. No pudo ser y encontró su estreno en 1842, en Dresde. Para entonces Wagner ya había compuesto El holandés errante (Der fliegende Holländer) y comenzaba la composición de Tannhäuser.

 

DRESDE OPERA HOUSE, 1842. ESTRENO DE RIENZI
J.C.A. RICHTER

·         Es fascinante - valora Gerard Mortier -, pero en mi juventud la pude oír en 1960 en una gran producción, en Munich. Al principio estaba en contra, pero al programarla para Madrid, vi que podía ser interesante. Ahora estoy convencido de que es fascinante ver cómo, en esta ópera, Wagner crea su lenguaje musical. Rienzi es una composición muy interesante porque. en ella, Wagner desarrolla muy rápido su lenguaje musical en el tercer, cuarto y quinto acto. Es interesante en la personalidad de Wagner, pues muestra una extravagancia con solo 24 años, al concebir un gran ópera y que se interprete con una gran orquesta: 92 músicos en el foso, 46 en la escena y un gran coro. Esta grandiosidad de Wagner me fascinó mucho. En la partitura hay páginas sublimes y otras con influencia de Rossini y Bellini. Es un gran preludio al año Wagner y contamos con dos grandes cantantes alemanas: Anija Kampe (Irene) y Claudia Mahnke (Adriano)

 

ALEJO PÉREZ, EN RIENZI WAGNER BUSCA NUEVOS SONIDOS

 

La dirección musical se ha encomendado al argentino Alejo Pérez, el cual debuta en el Real en lo que respecta a la ópera, aunque ya había dirigido el concierto en homenaje a Luis de Pablo y Cristóbal Halftter.

 

·         En La Plata (Argentina), dirigía un Nabucco. Me había hablado de un director argentino muy grande en Argentina. Escuché el concertante del segundo acto y me gustó su interpretación. En la pausa fui a su camerino y le propuse la dirección de Rienzi. En los años próximos dirigirá diferentes óperas en el Real: Don Giovanni de Mozart (abril 2013) y La Conquista de Méjico de Wolfgang Rihm.

 

ALEJO PÉREZ

Alejo Pérez (Buenos Aires), posee un amplio repertorio musical y se interesa especialmente por la música contemporánea. Ha sido invitado a dirigir diversas Orquestas internacionales y su última dirección ha sido Le Rossignol en Lyon y Das Rheingold en La Plata. Para Alejo, Rienzi muestra:

 

·         Uno de los rasgos más interesantes como son la búsqueda de una serie de elementos. Normalmente las óperas son mundos cerrados, coherentes y completos. En sus obras de juventud tiene la oportunidad de descubrir la ebullición del mundo creativo del compositor. Wagner provenía de los  caminos tradicionales de escuela y era un autodidacta. Tenía mucha capacidad compositiva, pero a través de la intuición, análisis y la continua búsqueda. En el primer y segundo acto sigue la tradición y se trata de composiciones de mayor unidad: números cerrados muy clásicos. Cadencias - serie de acordes o fórmula de melodía que suele coincidir con el fin de una sección en una obra - para los solistas. Interrumpe la composición por su huída y cuando vuelve a la partitura, compone el segundo y tercer acto es otro Wagner, aunque mantiene la estructura de la obra. Hay toda una búsqueda de nuevos sonidos como es el registro medio de la cuerda en los violines y violonchelos en el cuarto y quinto acto. Es un sonido con más cuerpo, más alemán. Hay una inclusión armónica más cromática y un estilo más conmovedor en ese contexto de magnificencia mediante mayor intimidad. En el quinto acto compone un tema que es de los más célebres como es la plegaria de Rienzi. Llama la atención el contraste entre lo pomposo de la obertura y la intimidad de esta plegaria. Otro de los elementos nuevos es el rasgo de atrevimiento en fuerzas vocales, orquestales y escénicas, que aparece como revolucionario en todo el contexto.

 

El Rienzi del Real se ofrece en versión de concierto. Esta elección advierte Alejo:

 

·         hace que no se aprecien los rasgos de Wagner como dramaturgo, puesto que él es el creador del libreto, que lo ha escrito, pensando en términos teatrales. Existe un ballet, que en nuestra versión hemos cortado. En la Gran Ópera se solían introducir ballet como entretenimiento desgajado de la acción, pero Wagner lo construye como parte de la acción. En la partitura indica prolijamente lo que debe suceder y aclara mucho la acción escénica.

 

RIENZI, SIEMPRE CON CORTES

 

RICHARD WAGNER

De Rienzi existen muchas versiones dada la longitud y complicación vocal de la partitura.

 

·         Una de ellas la ha cortado la propia Cosima Wagner, pero el corte es excesivo - añade Gerard. Nosotros, como ha dicho Alejo, hemos cortado el Ballet, pues sin la acción teatral no funciona.

 

Los otros cortes han sido las repeticiones.

 

·         La repetición no aporta nada y por lo tanto la partitura no queda dañada. El hecho de que existan se debe a unas convenciones. A veces es por un mero virtuosismo de lucimiento, pero este no es el caso. Las repeticiones de Rienzi se debe a la exigencia de la época. No existían las grabaciones ni los DVD. Entonces había que grabar en la mente del espectador las melodías para que le fueran familiares y eso en el mismo teatro. Actualmente esto no tiene sentido, cuando se pueden volver a escuchar en una grabación.

 

HITLER MURIÓ CON EL MANUSCRITO DE RIENZI

 

La realidad es que Rienzi no se ha prodigado mucho. Según Alejo:

 

·         Esto se debe a factores extramusicales. Uno de ellos es que al final de su vida era ya un reto, pero Wagner hablaba con mucho orgullo de Reinzi, que  fue muy tocado en su época y finales del siglo XIX. Una segunda razón es que era la obra favorita de Hitler, el cual tenía el manuscrito y los "pelotas" se lo rifaban. El manuscrito terminó en el bunker de Hitler y desapareció. Actualmente no existe ninguna partitura original y hay que acudir a las diversas versiones e instrumentar algunas partes. Esto hizo que el destino de Rienzi se asimilase, durante décadas,  al mundo nazi y fuese confinado después de la segunda guerra, pero la ópera, en sí misma, no es nazi. Tal vez por eso no se toca tanto, aparte de la dificultad que supone su partitura.

 

ANJIA KAMPE
CLAUDIA MAHNKE
ANDREAS SCHAGER
Hitler, con 17 años, la escuchó en Linz y le fascinó. Posteriormente en el Congreso del NSDAP en Núremberg (1939) utilizó la obertura como inauguración. Le venía muy bien con su afán pomposo y populista, que también aparecía en Rienzi alabado por las masas.

 

ANJA KAMPE: ME GUSTA EL QUE HAYA QUE CANTAR CON EL CORO

 

Gerard Mortier insiste en las excelencias de las dos cantantes alemanas que interpretan a Irene y a Adriano.

 

·         Anja Kampe ya ha cantando El holandés errante y Ariadne de Naxos en el Teatro Real. Es una de las grandes sopranos wagnerianas. Estoy muy contento de que haya aceptado. Canta la parte de Irene, un papel enorme. Claudia Mahnke es la gran mezzosoprano wagneriana en estos momentos. Interpreta el papel de Adriano, que es el papel más interesante. Es el hombre enamorado de Irene, la hija de Rienzi. Para este papel, Wagner se inspiró en la Semiramis de Rossini.

 

Según Anja Kampe las dificultades vocales de su personaje está en que...

 

·         se trata de una voz muy aguda y no tienes bajos. Después tienes que cantar muy fuerte para que el Coro no te tape pues se canta conjuntamente. No es un papel como otro propios de Wagner, ya que es muy simple. Me gusta el que haya que cantar con el coro, pero no me gusta el personaje en sí. Es un poco rollo, no es interesante.


CLAUDIA MAHNKE: MI PERSONAJE FUNCIONA MUY BIEN

 

Claudia Mahnke y Anja Kampe estudiaron juntas y compartieron apartamento en sus inicios. Claudia Mahnke, ganadora de varios premios en concursos internacionales, fue contratada como cantante estable en la Ópera de Stuttgart y a partir de 2007 en la Ópera de Fráncfort. Invitada a otros auditorios, recientemente hasido Waltraute y Segunda Norna en Götterdämmerung de la Ópera de Fráncfort. 

 

·         Mi personaje canta continuamente y es muy largo. A pesar de estar compuesto para mezzosoprano la tesitura es muy alta, casi de soprano y no tiene bajos profundos. Funciona muy bien. Es la primera vez que actuo en una versión operística de concierto.

 

Es frecuente en el mundo de la ópera el adjudicar personajes masculinos a las mezzosopranos. La voz más profunda de esta tesitura contrasta con la de la soprano más aguda. En este caso la mezzosoprano es casi una soprano, pero según Alejo...

 

·         ...funciona muy bien pues son dos coloratura diferentes. 

 

 

EL CORO PROTAGONISTA,

REFORZADO POR LA PHILARMONIA CHOR DE VIENA

 

El tercer protagonista es el Coro que en palabras de Andrés Maspero, director del Coro del Teatro Real:

 

·         Su participación es muy importante. Cuando se conoce la obra posterior de Wagner, en Rienzi se notan paralelismos en el comienzo de su obra y el final. Se escuchan marchas militares bandistas, también se reconoce el "bel cantismo" y  cuando el Coro canta al unísono se acerca al coro de Nabucco de Verdi, que , por otro lado, se estrenan ambas óperas el mismo año. El joven Verdi y el joven Wagner poseen un gran paralelismo en sus comienzos. Yo he hecho todas las óperas de Wagner en Alemania, país en el que se repiten todas las temporadas, siendo El holandés errante el que más, y en Reinzi al principio, la obertura es otro Wagner. Al final es nuevo: comienzan las bandas y 80 cantantes en el coro. Lo que no fácil de imaginar cómo se realiza esa parte escénicamente. Hemos conseguido una sonoridad superior al del Festival de  Bayreuth.

 

El Coro Titular del  Real es reforzado por la Philarmonia Chor de Viena que cantó I due Figaro (CLIKEAR), esta temporada.  No es la primera vez que el Real tiene estas colaboraciones. Ya lo hizo en San Francisco (CLIKEAR) con el Coro de Valencia. Según Andrés Maspero:

 

·         tales colaboraciones han sido siempre un gran acierto, y hemos quedado muy satisfechos. En Reinzi la estructura coral es homófona y no polifónica.

 

RIENZI SÓLO SUPERADO POR DIE MEISTERSINGER

 

Al éxito de Rienzi sólo le superó Die Meistersinger. Con esta ópera le llegó el prestigio y el ser nombrado Kapellmeister (Maestro de capilla) en Dresde. Pero, como ya se ha dicho la carrera de Reinzi se vió marcada por las continuas reducciones debido a su larga duración de 6 horas. Así se hizo para la representación en Hamburgo (1844) y Berlín (1847). El propio Wagner se fue distanciado de su obra y la consideró como solo un anticipo de su auténtica obra musical. En 1900 Cosima Wagner, su esposa, la quiso hacer más digerible y metió la tijera cortando las cadencias que separaban los números entre sí y propiciando una mayor fluidez musical. Tales arreglos no consiguieron que se estrenase en el Festival de Bayreuth.


José Ramón Díaz Sande
Copyright©diazsande


 

Última actualización el Lunes, 04 de Junio de 2012 10:36
 
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